CUENTOS DE DUBLÍN

Si los vicios de Dublín son los de cualquier otra ciudad moderna, las virtudes de ”la séptima ciudad de la cristiandad” son únicas. En ”Dublineses” se conversa, se canta y se bebe hasta la saciedad. — así lo constata el quizá mayor especialista que existe sobre Joyce como es Harry Levin—. Esto ayuda al estilo, la poesía y la fantasía— cualidades irlandesas muy propias de Joyce. Ellmann , en su gran biografía de Joyce, recuerda que fue en Roma donde el escritor irlandés concibió ”Los muertos”, el mejor cuento entre todos los que tratan de Dublín. Únicamente cuando Joyce dejó Roma quedó definitivamente concebido el relato. En su mente se fueron acumulando indicios. intuiciones y viejos recuerdos que aprovechó totalmente el escritor. ” Los muertos” empiezan con una fiesta y termina con un cadáver. ” Siento cada vez mas intensamente cada año que pasa — le escribió Joyce a su hermano en 1906– que no hay en nuestro país tradición que le honre más y que deba conservar con más celo que la hospitalidad. Es una tradición única entre las naciones modernas.” En muchos cuentos de”Dublineses” se trata de la dependencia entre vivos y muertos, tema que ya había tratado Joyce en su primera juventud. Es el tema del primer cuento, aparte de referirse a él en el último. Harold Bloom recuerda que ”Dublineses” es una visión de juicio dantesco. ”A Gabriel Conroy, protagonista de ”Los muertos”, lo veía Joyce como uno de esos traidores, aunque más de pensamiento y sentimiento que de obra. Ese juicio de Joyce implícito, añade Bloom, puede parecer algo severo, pero fue Dante quizás el más intransigente de todos los poetas moralistas. Gabriel Conroy es un débil y un parásito, una especie de artista fracasado a pesar de que la mayoría de nosotros no lo consideraría un condenado.

Son memorables y muy citadas las frases finales de ”Los muertos” que hablan sobre la nieve Ellmann recuerda que ”la nieve parece participar también de esa decadencia de que el cuento trata. Vista desde la fiesta es deseable, inalcanzable. Al final, cuando los participantes en lla fiesta andan hacia el taxi, la nieve empieza a derretirse y quedan sólo algunos parches. Después, vista desde el hotel, pertenece a todos los hombres, en general, todos la comparten. Bajo ella, todos los seres humanos, cualquiera que sea el grado de intensidad con que son capaces de vivir , quedan unidos. Lo común es que todos los hombres son capaces de sentir y perder sus sentimientos, que todos comparten la simpatía.”

José Julio Perlado

(Imágenes—1– Dublín – wikipedia/ 2- portada de ”Dublineses”/ 3- “Los muertos” de John Huston)