“Ruin es el que se presenta y pide en empréstito al mismo que tiene defraudado — dice el filósofo griego Teofrasto —. Es también el que, llamando a su esclavo, le da carne y pan que toma de la mesa, diciéndole en presencia de todos: “Engulle, bien, honrado.” El que comprando la vianda le recuerda al carnicero el beneficio que acaso le haya hecho, y arrimándose al peso, añade a la balanza, en primer lugar, carne, y si no puede, aunque sea un hueso. Si lo puede pillar, queda muy ufano; si acaso no, arrebatando de la mesa aun una tripa, escapa al mismo tiempo dando carcajadas. Si alquila o toma a nombre de forasteros, sus huéspedes, butacas para el teatro, no paga su parte, y lleva al día siguiente a sus hijos. Si alguno lleva alguna cosa barata especial, pedirá que le dé parte, y entrando en casa de otros tomará cebada prestada, y alguna vez hasta paja, precisando a los que se la prestan que se la lleven a su casa.”
(Imagen —Richard Tuschmans)