
Arrastraba la corriente de un río — escribió Esopo— una jarra de cobre y otra de barro. La de cobre le dijo a la de barro que no se inquietara, que ella la cuidaría ,pero la de barro le respondió:
— Nada lejos de mi y no a mi lado , porque si me tocas saltaré en pedazos, aunque me roce contigo sin quererlo.
No es segura la vida de un pobre que tiene a un príncipe rapaz por vecino.
(Imagen- Jarra de Sévres- 1795- museo de Arte Moderno de Nueva York