
“Nuestra vida es el cumplimiento del deber que nos ha sido impuesto — escribe Tolstoi en su “Diario” en 1884– Y todo está hecho para que este cumplimiento sea gozoso. Todo está inundado de alegría. Los sufrimientos, las pérdidas, la muerte: todo es bueno. Los sufrimientos producen felicidad y alegría, del mismo modo que el trabajo aporta descanso, el dolor la conciencia de la salud, la muerte de los seres queridos la conciencia de deber, porque es el único consuelo. La muerte propia da el sosiego. Pero no se puede decir lo contrario; el descanso no produce la fatiga, ni la salud el dolor, ni la conciencia del deber la muerte. Todo es alegría en cuanto hay conciencia del deber. La vida del hombre, tal y como la conocemos, es una ola toda vestida de esplendor y alegría.”

(Imágenes— 1- Tolstoi- Wikipedia/ 2- Tolstoi- 1901)
Saludos, esta entrada, me gusta en cuanto su reflexión de la alegría y la tristeza. Le felicitó en ponerlo en perspectiva, muchas gracias.
Juan
Tolstoi expresaba muchas veces su sentido positivo y alegrre de la vida reflejado en las epopeyas y la épica de sus grandes novelas.
Muy agradecido a tu comentario.
Saludos.
Saludos, Julio, gracias por su respuesta.