“Si has aprendido a satisfacer tu cuerpo con poco — dice el filósofo griego Epicteto —, no te glorifiques contigo mismo. Si te has acostumbrado a beber agua solamente, no pienses andarte alabando de ello, y si alguna vez quieres ejercitarte en tu trabajo, ejercítate privadamente y no desees ser visto de los demás, a ejemplo de los que corren a abrazar las estatuas para juntar el pueblo y en este estado gritan que les hacen violencia. Cualquiera que así busca la gloria, la busca por fuera y pierde el fruto de la paciencia y de la frugalidad, porque establece el fin de estas excelentes virtudes en la opinión de la multitud. Cierto que toda afectación en esto es vana e inútil. Si quieres acostumbrarte a la paciencia, toma agua fría en la boca cuando tienes gran sed y arrójala luego sin tragar una sola gota y no digas nada a nadie.”
(Imágenes—1- Hugo Suter/ 2-Jon Redmont)