
“Con hilo blanco
hilvano las palabras nuevas
que caen en mis rodillas
como una lluvia de nubes sin tiempo,
los insectos oscuros
que se desprenden de las ramas
en las que nunca canta un ave,
las doradas astillas
con las que quiso arder un sol
que llegó tarde, los cantos rodados
y las burbujas del más hondo
arroyo de mi desconsuelo.
Con hilo blanco
voy formando un collar, una ristra,
que se enrosca al pecho, a los hombros,
a la garganta ; que pregunta
silenciosa y salvajemente,
que responde oprimiendo
para evitar las objeciones
y las preguntas indiscretas.
Con hilo blanco
hilvano palabras y sustos,
caparazones y fracasos,
cuanto no es por sí solo
nada que valga un nombre,
cuanto atormenta en las tardes inmersas
bajo un dios demasiado alto;
con hilo blanco,
con hilo negro.”
Ángel Crespo
(Imagen — Erwin Blumenfeld – 1938)