
“ Yo estoy cansado ya de pensar cómo
de vos no se cansó mi pensamiento,
y cómo no he dejado aún la vida
por huir de suspiros tan pesados,
cómo de hablar del rostro y los cabellos
y los ojos, que siempre estoy cantando,
no fallaron la lengua y el sonido
noche y día diciendo vuestro nombre::
y que mis pies no sientan el cansancio
de seguir vuestra huella en todo sitio
perdiendo inútilmente tantos pasos;
de ello viene la tinta, y los papeles
que de vos lleno y si fallase en esto,
culpa es de Amor, y no defecto de arte.”
Petrarca— “Cancionero”,
(Imagen— Hannes Caspar)