POR QUÉ UNO ES NEGRO Y OTRO BLANCO

 

“Originariamente — recordaba la antropóloga norteamericana Margaret Mead —los hombres estaban en partes del mundo muy alejadas unas de otras y muy diferentes. Si uno vive en los trópicos, le es muy útil tener la piel oscura, porque le protege del sol; y si por el contrario vive cerca del Polo Norte, necesita de todos los rayos que puedan alcanzarle, y por lo tanto es ventajoso que tenga la piel blanca. Y han sido necesarios quinientos mil años para que esos individuos se diferenciaran. En sus orígenes, por tanto, el problema de la piel fue un problema de adaptación al ambiente. Pero actualmente cada uno se mueve por los lugares propios del otro con entera libertad; el blanco va a los trópicos y permanece en ellos porque tiene aire acondicionado; y el negro puede mantenerse al calor o al frío en cualquier lugar donde quiera establecerse.

Hay enfermedades y también sustancias químicas que producen un cambio de color. En algunos libros se ha hablado de qué manera alguien cambió el color de la piel tomando ciertas sustancias que luego le hicieron enfermar. Cambiar de color le ocurre incluso a gente que se establece en otra nación durante un largo período de tiempo. Por ejemplo, los caucasianos que viven largo tiempo en Asía toman aspecto de asiáticos porque sonríen como los habitantes del lugar y sus ojos adquieren una apariencia oriental.

No hay desigualdades de inteligencia entre blancos, negros y amarillos. Todo depende de la educación que se recibe. Si se toma un niño esquimal y se le educa como a un italiano o un inglés, cuando sea mayor será igual que ellos. En cuanto a la inteligencia, el método que empleamos en la actualidad para probarla consiste en estudiar gemelos idénticos, criados en ambientes diversos. La influencia más poderosa en el proceso intelectual del hombre es la civilización en que vive. Los seres humanos están hechos de tal forma que individuos  con determinadas dotes mentales, nacidos en el ámbito de determinada cultura, pueden funcionar dentro de los límites de aquel saber, hablar su lenguaje y seguir sus costumbres. El traslado de individuos procedentes de culturas técnicamente atrasadas a culturas modernas muy avanzadas, ha demostrado que una persona no evolucionada puede llegar a asimilar la tecnología más sofisticada. Del mismo modo, un niño nacido en una cultura compleja que haya sido adoptado por parientes que viven en una cultura más primitiva o más sencilla, no se elevará del nivel de sus padres adoptivos. Es decir, no somos todos iguales, porque hay tontos e inteligentes. Pero la estupidez y la inteligencia no son cosas inherentes a la raza.”

 

 

 

(Imágenes—1- Phillippe Vgnat/ 2- Erwin Blumenfeld -1938)