“No hay estación como la Primavera
cuando en todas las cosas está viva la vida,
antes de que las nuevas crías canten
y las golondrinas se retiren veloces
por caminos sin sendas.
– Dios guía su vuelo
y prepara su mesa para que nada les falte -,
antes de que una flor más sean las margaritas,
antes de que tenga fuerza el sol
de abrasar el mundo al mediodía.
No hay estación como la Primavera,
la Primavera que tan pronto se va;
no hay vida como la vida efímera que nace en Primavera:
el cesped reverdece,
se viste la desnuda tierra,
hay vida en el nido,
pluma sobre rama agitada,
poderoso vuelo:
no hay estación como la Primavera, tan efímera,
recien nacida ahora y ya
apresurándose a morir”.
Christina Rossetti .-“Primavera”.
(Imágenes:- 1.-Henri Edmund Cross.-1856-1910/ 2.-Edward Atkinson Homel.-1864-1933)
Bello poema y efímera la primavera, como la vida. No caben más flores en estos cuadros, ni más vida! Feliz Pascua!
Mariangela,
Por eso la vida – como las flores – hay que aprovecharla.
Feliz Pascua!
Hermosas palabras e imágenes. Yo vengo de disfrutarlas en el campo, todo brotado y florecido, y se agradecen como una continuación de ese estallido de vida tras el regreso a la ruidosa y gris ciudad.
Gracias y saludos
Palabras de sirena,
Quizá convenga guardar en la pupila los colores del campo ante tanto gris de la ciudad.
Saludos.