
“ Se os ha dormido un pie, una mano — escribe Eugenio D’Ors en la “Oceanografía del tedio”. —Ahora esto es vuestro y no es vuestro. Vuestro contorno, vuestro insoportable contorno de siempre, se ha modificado. Ahora terminarás más acá de lo que terminabáis. Pero más allá — ¡más allá que vosotros! – un leve hormigueo os acompaña, un leve hormigueo, en vosotros y fuera de vosotros sentido. De repente, la sensación sorda se vuelve precisa. Un pinchacillo de dolor. Un pinchacillo de dolor que aumenta la delicia aún. Y la vida que vuelve. El pie, la mano, colonizados de nuevo por el yo normal. El propio contorno, que se modifica, que se ensancha. Ha sido reconquistada una díscola provincia de la carne.”
(Imagen — Felix Valloton)
This was llovely to read