“Ser viejo es regresar y yo he vuelto a ser niño.
Eché un poco de agua en una palangana
y oí toda la noche el croar de las ranas
como, cuando muchacho, pescaba yo en Fang- Kuo.
Palangana de barro, estanque verdadero:
el renuevo del loto es ya una flor completa.
No olvides visitarme una tarde de lluvia:
oirás, sobre las hojas, el chaschás de las gotas.
O ven una mañana : mirarás en las aguas
peces como burbujas que avanzan en escuadra,
bichos tan diminutos que carecen de nombre.
Un instante aparecen y otro desaparecen.
Un rumor en las sombras, círculo verdinegro,
inventa rocas, yerbas y unas aguas dormidas.
Una noche cualquiera ven a verlas conmigo,
vas a oír a las ranas, vas a oír al silencio.
Toda la paz del cielo cabe en mi palangana.
Pero, si lo deseo, provocó un oleaje.
Cuando la noche crece y se ha ido la luna
¡Cuántas estrellas bajan a nadar en sus aguas!”
Han Yü — “La palangana”- poeta chino (año 800 después d. Cristo)
(Imágenes—1- Michael Kenna/ 2-Don Hong oai/ 3-Zhang daqian)