“Al principio las gotas hacían temblar las ramas
y nosotros, detrás de la ventana, esperábamos
a que el agua lavara las hojas más ocultas.
Luego estalló la tormenta y llovió a mares,
habíamos puesto un vaso en el alféizar
para medir el agua de la lluvia.
A las cuatro salió el sol
y en la ventana brillaba el vaso
lleno hasta rebosar.
Mi hermano y yo nos lo bebimos a medias
y luego nos pusimos a comparar el agua
del pozo con la del cielo, que es más blanda
pero tiene el olor de los relámpagos.”
Tonino Guerra -“ La miel” – ( traducción de Juan Vicente Piqueras)
(Imágenes -1-Lewis Noble/ 2- Hugo Suter)