«Sobre el lienzo de lino inmaculado
que tensa el bastidor de la mañana
se trazó el primer día
la pincelada roja.
Como si de repente la oblea de este mundo
comenzara a sangrar.
Como si alguien clavase
un alfiler en medio del pan ácimo
y de su corazón escapara una gota
de rojo inconcebible.
Rojo ciego.
Escrito en sangre está, todo está escrito
con nuestra propia sangre derramada.
Esta sabiduría, esta belleza,
este edificio en pie del pensamiento,
esta aventura insomne
de ser sin que sepamos por qué somos,
están flotando sobre un mar de sangre.»
Carlos Marzal. –«Rojo»
( Imagen. – Mark Rothko en su estudio)