todo de flores amarillas:
amarillo el arroyo,
amarillo el vallado, la colina,
el cementerio de los niños,
el huerto aquel donde el amor vivía.
El sol ungía de amarillo el mundo,
con sus luces caídas;
¡ay, por los lirios áureos,
el agua de oro, tibia;
las amarillas mariposas
sobre las rosas amarlllas!
Guirnaldas amarillas escalaban
los árboles; el día
era una gracia perfumada de oro,
en un dorado despertar de vida.
Entre los huesos de los muertos,
abría Dios sus manos amarillas».
Juan Ramón Jiménez : «Primavera amarilla«.-Poemas mágicos y dolientes.-1909
(Imágenes.-1.-paperimages. tumblr/ 2.-Roger Scott.-paperimages)


Maravilloso, gracias!
En estos días donde todo suena a furor, a rugido de bestias que se han incapacitado para la razón, poemas como éste, vienen a darnos el sosiego tan necesario y a mostrarno los importante…
Este poema es una delicia, sobre todo ese final apoteósico y rotundo.
Gracias por traerlo