RETRATO DE LORCA

“La primera y ünica vez que vi a Federico García Lorca, un año y medio antes de que muriese  — decía el gran periodista italiano Montanelli —, lo encontré ocupado en pintar. El pastel era, con el piano, su pasión, y alguien me dice hoy que tenía un sentido  del color comparable al de Matisse. Es posible, pero no estoy en condiciones de emitir juicios. El único cuadro suyo que he visto, apenas esbozado, es el que estaba componiendo aquella tarde de primavera en Madrid y que me ha dejado solamente una confusa impresión de rojo y amarillo, igualmente violentos. Fui a verle no para medir su habilidad ante el caballete, sino por la curiosidad que me inspiraban sus poesías y la leyenda, que a veces ya comenzaba a aurolearle y que él me confirmó, esquivando hábilmente mis preguntas a propósito de su origen gitano.

García Lorca era de estatura media, de rasgos más bien toscos, de frente convexa, de espesos y lisos cabellos, sólo tenía tres cosas: la mirada luminosa, la risa de niño y la voz, cuya gravedad baritonal y cálida recordaba el cante jondo que se estremece, como un acompañamiento de guitarra, en sus poemas. “Tiene ángel”, decían de él sus amigos. Y comenzó a tenerlo de veras, cuando en el curso de la conversación  cayó, no sé si a iniciativa mía o suya, el nombre de Dali. Entonces García Lorca, hasta aquel momento distraído, se animó de improviso y abriendo un cajón, sacó, para mostrármelos, los dibujos que su amigo, le había mandado desde Cadaqués. Eran unos Dalí surrealistas: rocas con rostros humanos, blandos monstruos marinos, esponjas calcinadas paseándose con muletas por la playa. Lorca enloquecía por esas cosas, de las que a mí solamente se me ocurría admirar la diligente ejecución, el perfecto dibujo, la industria artesana.

Años después, Indro Montanelli fue a ver a Dalí:  “ No había nada de extraordinario en Lorca, ¿ sabe? — le dijo el pintor —.En él se había encarnado un fenómeno poético sin ley, sin contornos, sin nada “comestible”. Era…”un joven”. ¡Mientras que de mi obra quedará un gran fuego, destinado a calentar la Humanidad por los siglos venideros, de la suya no permanecerán sino algunos rescoldos entre mucha ceniza…! No, no tenía nada de extraordinario, Federico…”

(Imágenes—: 1- Lorca— Wikipedia/ 2- Lorca con Buñuel  y otros escritores y  amigos- 1923/ 3- Lorca con Margarita Xirgu- La Vanguardia/ Dalí- Foto Arnold Newman)

DOS MÁS DOS SON CINCO

 


“Siempre he pensado que en muchos terrenos del arte y la literatura dos + dos son cinco.  Es el salto a la fantasía, yo diría que el salto a la creación. La suma de los realismos nos entrega siempre el cuatro. La suma de las innovaciones, de los atrevimientos, de las vanguardias, nos entregará el cinco.  Dos + dos nos dan el cuatro siempre que un ojo esté situado  — y normalmente está situado —a la misma altura del otro en  el rostro de una mujer, uno a cada lado . Pero cuando Picasso pinta dos ojos juntos en la misma mejilla ha asumido hace tiempo que dos + dos son cinco y ese cinco le da la libertad de crear, de romper con lo que creíamos que era  lo establecido. Y el público ama ese cinco, aunque al principio le descoloque. Ese cinco es el salto de la aventura , sin ese cinco todo seguiría igual, la historia del arte sería  quizá un cuaderno de repetición.

 

 

Lo mismo ocurre  en la literatura . Lo tenemos en Gógol,  cuando un funcionario de San Petersburgo pierde su nariz y ésta adquiere vida  propia y recorre una experiencia distinta. O en el italiano Ítalo Calvino  que nos presenta  al “barón rampante”, Cosimo, que vive entre los árboles y viaja por los árboles; o en el “vizconde demediado”, Medardo de Terralba, partido en dos por una bala de cañón y viviendo dos vidas distintas; o en “el caballero inexistente”, esa armadura vacía, sostenida solo por su voluntad de ser. Calvino quiso reunir estos tres relatos bajo el título de “Nuestros antepasados”, pero yo creo que no son antepasados sino que están muy presentes porque abren una ventana a la fantasía y a la libertad creadora, algo que los recintos cerrados de otros textos anhelan de vez en cuando.

 

Si nos asomamos  por otro lado a Chagall veremos a gentes  viajar tumbadas y cruzadas entre las nubes, en el silencio de la noche, procesiones de sombras que nos revelan ese cinco del que hablamos al sumar dos + dos en la creación.  En el Arte Fantástico el Bosco nos proporciona imágenes  tremendas e inolvidables, el milanés Archimboldo compone con flores y frutas rostros  sorprendentes, Dalí se adentra en  audaces realidades oníricas, y habría que seguir en una lista muy numerosa de invenciones y atrevimientos que arte y literatura nos ofrecen.

No me queda por añadir mas que amo ese cinco. La resultante de esa suma del dos y el dos que da un salto de repente,  ilumina una chispa y en vez de caer al vacío deja extendido el mágico campo  de la sorpresa y la imaginación.”

José Julio Perlado

 

 

(Imágenes— 1-Picasso- 1937/ 2-Giuseppe Archimboldo-1566/ 3-Chagall – homenaje a Gógol- momaourgt/ 4-Chagall – sobrevolándo vitebsk)

EL ELOGIO DEL PAN

 

 

“Contra la amenaza del esteticismo culinario — escribe Alberto Savinio en su ‘Nueva enciclopedia” — tenemos, afortunadamente, un arma invencible: el fiel  panecillo, alimento solariego, alimento grave y, al mismo tiempo, irónico, gorrión de los alimentos, geniecillo tutelar de la mesa. El pan tiene en la alimentación  un papel particular e insustituible. En la mesa del pobre el pan constituye la base misma de la comida ( pan y condumio) , o sea, en ambas palabras y en otros lugares es el acompañante necesario de todo alimento, el contrabajo que dirige la extensión de la melodía, el guía seguro y virtuoso, el corrector: suaviza los sabores demasiado vivos, anima los demasiado débiles, une los más diversos entre los demasiado semejantes, establece una oportuna división. Uso lamentable, indicio de pésimo gusto y de ánimo profundamente vulgar, es suprimir el pan de la mesa, o reducirlo a un minúsculo “acto de presencia”, porque el pan es el alimento del pobre, y en consecuencia “poco elegante”. El pan mitiga la artificiosidad culinaria y en medio de la química de las “piezas montadas”, representa lo honrado, lo sobrio, lo natural. El hombre de ánimo mínimamente honrado no aguanta sobre la mesa un panecillo puesto del revés, y se apresura a darle la vuelta.”

(Imagen— Salvador Dalí- Fundación Dali)

ESPAÑA Y LOS ESPAÑOLES

 

“Los españoles son grandes, suelen ser morenos, son orgullosos, leales y humanos , perezosos y sobrios, pacientes y espirituales, muy galantes, menos celosos que en otros tiempos — podía leerse en un “Diccionario de geografía universal” de 1806—; las mujeres suelen ser de una talla pequeña y esbelta, con mucho espíritu y vivacidad; la lengua española es sonora, majestuosa y sublime, pero no pobre”.

“Hay nombres españoles — escribía Madame de Stael — que no pueden pronunciarse sin que nuestra imaginación no crea ver enseguida los naranjos de Granada y los palacios de los Reyes moros.” “ No se detecta en esta nación  — decía  por su parte Chateaubriand—ningún aire servil, ninguna frase que anuncie la degradación del pensamiento y del alma.”

”A lo lejos la tierra recuerda al campesino español — señalaba asimismo el  historiador francés Edgard Quinet en el siglo XlX —.Desnudo como él, se instala bajo el sol. La tierra es silenciosa  como él. Sobrio como él, la rosa la fertiliza. Independiente como él; ni fosos ni barreras; la igualdad está grabada en su cara.”

 

 

(Imágenes—1– Salvador Dalí – 1938- museum boymams van veunigen – Róterdam/ 2-Felipe lV/ 3– campos de Castilla- dibujo de Miguel de Unamuno- universidad de Salamanca )

CUADERNO DEL AGUA (2) : FUENTES , SURTIDORES Y LAGUNAS

 


El español Joaquín Turina en sus » Danzas gitanas» habla de esos surtidores del agua de la Alhambra. Rusiñol recogerá el paso del agua en el Patio de los Leones de la Alhambra en 1887.  Lorca canta a los surtidores en el Cuarto Dorado del Palacio de Comares en la Alhambra. Surtidores de agua glosará Juan Ramón en » Olvidos de Granada» (1924) Y surtidores aparecen  también en fuentes famosas como las que retrata el italiano Respighi con su poema sinfónico sobre la fontana de Trevi  en la mañana, la tarde y el anochecer. Debussy, que desde tantos ángulos trató musicalmente el agua, habla del chorrear del agua en sus «Jardines bajo la lluvia»( 1904) Los manantiales ya habían sido tratados por Listz en  sus «Años de peregrinaje» cuando compone «Al pie de un manantial» y esos  murmullos del agua de manantiales y arroyos los había abordado Beethoven en el segundo movimiento de su «Pastoral», como la tormenta asomaba en su cuarto movimiento. Es el sonido de una cascada el que recogerá igualmente Richard Strauss en su «Sinfonía alpina». Y como algo curioso  el francés Paul Sébillot anotará en su » folklore de las aguas» que «rara vez está el diablo en las fuentes y en cambio sí el nombre de los santos».

 

Respecto a las fuentes,  su agua durante siglos ha estado unida a la música. Hay que evocar la Fuente de los Cuatro Ríos de Bernini en la romana plaza Navona y  la escalera del agua del Generalife en la Alhambra. Aguas proféticas manan de la fuentes, se decía ya en los misterios egipcios, y las fuentes hablaban como oráculos señala Tácito.  Fuentes que a lo largo de siglos han aparecido como obras de arte en ciudades de Suiza y de Italia.

 

 

«El agua  ensimismada, ¿ piensa o  sueña?», se preguntará ante un estanque Maria Zanbrano. Monet, por su parte, construyó en Giverny un jardín acuático y varios estanques de azucenas, logrando un amplio rincón incomparable de agua y de color. Debussy, en 1905, escribe «Reflejos en el agua», dedicado a la luz en el estanque, y a su vez Dalí pintará la imagen de Narciso reflejada en un estanque en su «Metamorfosis de Narciso». El pintor Patinir mostrará «El paso de la laguna Estigia», que puede verse en El Prado.

 

El español Joaquín Turina en sus » Danzas gitanas» habla de esos surtidores del agua de la Alhambra. Rusiñol recogerá el paso del agua en el Patio de los Leones de la Alhambra en 1887.  Lorca canta a los surtidores en el Cuarto Dorado del Palacio de Comares en la Alhambra. Surtidores de agua glosará Juan Ramón en » Olvidos de Granada» (1924) Y surtidores aparecen  también en fuentes famosas como las que retrata el italiano Respighi con su poema sinfónico sobre la fontana de Trevi en la mañana, la tarde y el anochecer. Debussy, que desde tantos ángulos trató musicalmente el agua, habla del chorrear del agua en sus «Jardines bajo la lluvia»( 1904) Los manantiales ya habían sido tratados por Listz en  sus «Años de peregrinaje» cuando compone «Al pie de un manantial» y esos  murmullos del agua de manantiales y arroyos los había abordado Beethoven en el segundo movimiento de su «Pastoral», como la tormenta asomaba en su cuarto movimiento. Es el sonido de una cascada el que recogerá igualmente Richard Strauss en su «Sinfonía alpina». Y como algo curioso  el francés Paul Sébillot anotará en su » folklore de las aguas» que «rara vez está el diablo en las fuentes y en cambio sí el nombre de los santos».

Respecto a las fuentes,  su agua durante siglos ha estado unida a la música. Hay que evocar la Fuente de los Cuatro Ríos de Bernini en la romana plaza Navona y  la escalera del agua del Generalife en la Alhambra. Aguas proféticas manan de la fuentes, se decía ya en los misterios egipcios, y las fuentes hablaban como oráculos señala Tácito.  Fuentes que a lo largo de siglos han aparecido como obras de arte en ciudades de Suiza y de Italia.

 

 

 

«El agua  ensimismada, ¿ piensa o  sueña?», se preguntará ante un estanque Maria Zanbrano. Monet, por su parte, construyó en Giverny un jardín acuático y varios estanques de azucenas, logrando un amplio rincón incomparable de agua y de color. Debussy, en 1905, escribe «Reflejos en el agua», dedicado a la luz en el estanque, y a su vez Dalí pintará la imagen de Narciso reflejada en un estanque en su «Metamorfosis de Narciso». El pintor Patinir mostrará «El paso de la laguna Estigia», que puede verse en El Prado.

El humedal de las tablas de Daimiel  y las lagunas de Ruidera aparecerán en El Quijote». Edgar Allan Poe en diversos cuentos habla del «agua pesada» y  en sus «Historias extraordinarias» describió un lago «amable»  durante el día y que provocaba terror por la noche. Ruidera aparecerán también  en El Quijote». Edgar Allan Poe en diversos cuentos habla del «agua pesada» y  en sus «Historias extraordinarias» describió un lago «amable»  durante el día y que provocaba terror por la noche.

 

 

 

((Imágenes— 1- Sorolla- La Alhambra/ 2-Roma- plaza de España/ 3- fuentes/- 4- Monet-Giverny/ 5- agua/ 6-Monet- nynpheas/ 7- fuente)

VIAJES POR ESPAÑA (24) : CADAQUÉS

 

 

“Desde el balcón del piso que tenía alquilado en Cadaqués miraba los pailebotes fondeados en la bahía. Las rachas de viento oscurecían el azul del mar. El cielo era de una vaciedad increíble. Las olas eran pequeñas pero seguidas, durísimas, y las cabrillas tenían una espuma que el viento se llevaba, sin peso.  Los pailebotes me distraían. Las cargas de naranjas y mandarinas, de un rojo descolorido, tenue, de un rosa pálido, parecían mejillas de criaturas dormidas. De las cocinillas de los barcos surgía a menudo un hilillo de humo que el viento quebraba, y me parecía estar oliendo el arroz a banda del cocinero. No olía nada: lo que olía era el mistral inodoro e insípido. Sin embargo, llegaba un día en que el viento paraba y los pailebotes seguían su camino hacia Francia. Aunque algún día tenía que pasar… ¡vaya sorpresa! La bahía quedaba vacía, de una monotonía, de un tedio abrumadores. Después de la tramontana, era como si el mar estuviera convaleciente. ¡Las cargas de naranjas y mandarinas! Era como si Cadaqués estuviera convaleciente. “

Josep Pla— “Notas del crepúsculo’ – Dietario (ll)

(Imágenes— 1- Cadaqués- la Vanguardia/ 2- Cadaqués- Salvador Dalí org)

NAVIDAD 2019 ( y 3) : NOCHEBUENA DE BERGMAN

 

 

 

“En nuestra casa la Nochebuena era un acontecimiento bastante tranquilo que empezaba con la oración de Navidad en la iglesia a las cinco y seguía luego con una comida alegre, pero mesurada — cuenta Bergman en sus “Memorias” —.Después se iluminaba el árbol, se leía el evangelio de Navidad y nos íbamos pronto a la cama porque teníamos que levantarnos a tiempo para la misa del alba que en aquella época era de verdad el alba. No se repartía ningún regalo, pero la noche era animada, un prólogo excitante de los festejos del día de Navidad. Después de la misa del alba, con sus velas y trompetas, daba comienzo el desayuno de Navidad. Después del desayuno íbamos todos a la cama a dormir unas horas. La organización interna tuvo que haber seguido funcionando ya que a las dos en punto de la tarde, justo al anochecer,  se servía el café. La casa estaba abierta para todos los que querían desear Felices Pascuas en la rectoría. Algunos de los amigos eran músicos de profesión y en las festividades de la tarde solía haber un concierto improvisado. Y así se iba acercando el cenit pantagruélico del día de Navidad, que era la cena. Tenía lugar en la amplia cocina donde provisionalmente se había suprimido el rango social.  La comida estaba en la mesa y en los bancos del fregadero cubiertos con manteles. Los regalos se repartían en la mesa del comedor. Se traían los cestos, mi padre oficiaba provisto de un puro y una copa de licor, se entregaban los paquetes, se leían versos, se aplaudían y comentaban; no había regalo sin verso.”

 

 

(Imágenes —1-Ghiberti/ 2- Christmas – Salvador Dalí)

VISIÓN DE ESPAÑA (4) : MOGUER

 

 

“El alma de Moguer es el pan. Moguer es igual que un pan de trigo, blanco por dentro, como migajón, y dorado en torno – ¡oh sol moreno! – como la blanca corteza

A mediodía, cuando el sol quema más, el pueblo entero empieza a humear y a oler a pino y a pan calentito. A todo el pueblo se le abre la boca. Es como una gran boca que come un gran pan. El pan se entra en todo: en el aceite, en el gazpacho, en el queso y la uva, para dar sabor a beso, en el vino, en el caldo, en el jamón, en él mismo, pan con pan. También solo, como la esperanza o con una ilusión…

Los panaderos llegan trotando en sus caballos, se paran en cada puerta entornada, tocan las palmas y gritan: “¡El panaderooo!”…Se oye el ruido tierno de los cuarterones que, al caer en los canastos que brazos desnudos levantan, chocan con los bollos, de las hogazas con las roscas…

Y los niños pobres llaman, al punto, a las campanillas de las cancelas o a los picaportes de los portones, y lloran largamente hacia adentro: “¡Un poquito de paaan!…”

Juan Ramón Jiménez —“Platero y yo” (1914)

(Imagen —Salvador Dalí)

NAVIDAD 2018 (2) : JOSEPH BRODSKY

 

 

“En Navidades todos somos un poco Reyes Magos.

Empujones y barro en los abastos.

Por una caja de turrón de café,

gente cargada con montones de paquetes

emprende el asedio del mostrador:

cada cual hace de Rey y de camello.

Cestas, bolsas, paquetes, envoltorios,

corbatas torcidas, gorros.

Olor a  vodka, a pino y a bacalao,

a mandarinas, a canela y a manzanas.

Un caos de caras, y no se ve, entre la nieve,

el camino que lleva a Belén.

 

(…)

Y lo que se festeja ahora por todas partes

es Su Advenimiento, que pone juntas

todas las mesas. Aún, quizás, no necesiten la estrella;

aunque la buena voluntad de los hombres

se distingue de lejos,

y los pastores encendieron las hogueras.

Cae la nieve; no echan humo sino suenan las trompetas

de las chimeneas en los tejados. Y las caras son manchas.

Herodes bebe. Las mujeres esconden a los chicos.

¿Quién se aproxima?  — nadie lo sabe:

ignoramos cual es su señal, y los corazones

puede que no reconozcan al forastero.

Pero, cuando en el umbral el aire disuelve

la espesa niebla nocturna

y surge la figura con manto,

al Niño y al Espíritu Santo,

lo sientes dentro de ti sin avergonzarte;

miras al cielo y ves la estrella.”

 

Joseph Brodsky – “ 24 de diciembre de 1971” (traducción de Svetlana Maliavina y Juan José Herrera de la Muela)

 

 

(Imágenes – 1-Salvador Dalí- / 2- change everyting/ 3-Brassai- 1932)

VERANO 2018 (8) : LEÓN FELIPE

 

 

“¿Dónde está la estrella de los nacimientos?

La tierra, encabritada, se ha parado en el viento.

Y no ven los ojos de los marineros.

Aquel pez —¡seguidle!—

se lleva, danzando,

la estrella polar.

El mundo es una  slot-machine,

con una ranura en la frente del cielo,

sobre la cabecera del mar.

(Se ha parado la máquina,

se ha acabado la cuerda).

El  mundo es algo que funciona

como el piano mecánico de un bar.

(Se ha acabado la cuerda,

se ha parado la máquina)…

Marinero,

tú tienes una estrella en el bolsillo

¡Drop a star!

Enciende con tu mano la nueva música del mundo,

la canción marinera de mañana,

el himno venidero de los hombres.

¡Drop a star!

Echa a andar otra vez este barco varado, marinero.

Tú tienes una estrella en el bolsillo…

una estrella nueva de paladio, de fósforo y de imán”.

León Felipe – “Drop a star” (1929)

(en los cincuenta años de su fallecimiento )

 

 

(Imágenes -1- León Spilliaert/ 2-Salvador Dalí – 1942- museo de San Petersburgo)

LA NAVIDAD Y BERGMAN

 

 

“En nuestra casa la Nochebuena era un acontecimiento bastante tranquilo que empezaba con la oración de Navidad en la iglesia a las cinco – cuenta Bergman en sus “Memorias” – y seguía luego con una comida alegre, pero mesurada. Después se iluminaba el árbol, se leía el evangelio de Navidad y nos íbamos pronto a la cama porque teníamos que levantarnos a tiempo para la misa del alba que en aquella época era de verdad el alba. No se repartía ningún regalo, pero la noche era animada,  un prólogo excitante de los festejos del día de Navidad. Después de la misa del alba, con sus velas y trompetas, daba comienzo el desayuno de Navidad. Para entonces mi padre solía desplegar su mejor humor y pronunciaba un improvisado discurso en verso para los invitados, cantaba canciones especialmente compuestas para la fiesta, brindaba con aguardiente, imitaba a sus colegas y hacía reír a todo el mundo.

(…) Después del desayuno íbamos todos a la cama a dormir unas horas. La organización interna tuvo que haber seguido funcionando ya que a las dos en punto de la tarde, justo al anochecer, se servía el café. La casa estaba abierta para todos los que querían desear Felices Pascuas en la rectoría. Algunos de los amigos eran músicos de profesión y en las festividades de la tarde solía haber un concierto improvisado. Y así se iba acercando el cenit pantagruélico del día de Navidad, que era la cena. Tenía lugar en la amplia cocina donde provisionalmente se había suprimido el rango social. La comida estaba en la mesa y en los bancos del fregadero cubiertos con manteles. Los regalos se repartían en la mesa del comedor. Se traían los cestos, mi padre oficiaba provisto de un puro y una copa de licor, se entregaban los paquetes, se leían versos, se aplaudían y comentaban; no había regalo sin versos”.

 

 

(Imágenes- 1- Salvador Dalí -Christmas 1946/ 2- Pietro Perugino)

VERANO 2014 (5) : ALVARO CUNQUEIRO

fantasía-ujuj-Julie Heffernan

 

«Mi primera idea es que un tesoro es una persona viva,  con su memoria y su voluntad- escribía Cunqueiro – No sé si es cierto lo que oí a Lady Gregory referente a que hubo un tiempo en que  todos los tesoros del mundo eran de un solo hombre y que éstos, cansados de él, huyeron y se escondieron en diferentes lugares y, para no ser encontrados, les pagaron a los magos del país para que los encantasen. El hilo de la vida del tesoro pende de que se deshaga este encanto o no. Si se deshace, el tesoro deja de serlo y se convierte en oro natural, y quien

 

fantasía-rrfyy-ilustración de Inga Moore

 

lo deshizo puede llevarlo para casa. Se han dado casos de tesoros que se convirtieron  de oro en ceniza, es decir, que, desvelado el secreto que los defendía, murieron. Los tesoros se dan entre ellos nombres, y a veces basta con saber el nombre del tesoro para que éste se una a quien lo dice.También  el tesoro puede consistir en una palabra, por ejemplo en el nombre secreto de un reino o de una ciudad, y entonces el que sabe ese nombre se hace dueño de aquel reinado o de aquella villa. Francia, Roma, Toledo, París tienen nombres secretos, que fueron muy buscados.

 

fantasía-rvvg--Alexander Jansson

 

Hay tesoros que todos los años tienen que comer o beber algo. Oí hablar de un tesoro en Valedouro que estaba guardado por un enano que llevaba una gorra colorada, y el enano tenia que sustentar al tesoro con sangre de oveja, aunque en otro tiempo lo mantuviera con sangre humana, con lo cual estaba siempre reluciente. Los del lugar se cansaron de darle ovejas al enano, que no quería pagárselas, y uno de Budián, que sabia leer y escribir, puso en un papel sellado
rostros-rress-ojos- joyas- Salvador Dalí- mil novecientos cuarenta y uno

 

que se negaban a aquella renta, y el enano al leerlo tuvo que conformarse, porque la negativa iba por escrito y llevaba una firma. El enano se marchó de la región con el tesoro, pero se le olvidó una tijera de oro, que la repartieron entre los vecinos. P. W. Joyce habla de un tesoro de Irlanda que enfermó del hambre que pasaba, y entonces salió a los caminos a pedir limosna de pan y alimento, que no quería cuartos, andaba con la vestimenta de soldado cojo, y en una boda bebió tanto que se descubrió, diciendo que era un tesoro y que tenía los huesos de oro. Lo mataron cortándole la cabeza, y debajo de la piel del cuerpo era todo moneda inglesa mezclada con una tierra blanca, y un sabio que estaba allí dijo, que si lo dejaban, él lo atraparía y cebaría, y que después, cuando lo matase, estaría todo lleno de oro por dentro.

 

fantasía.-58hh.-Marina Marcolin

 

(…) Los tesoros están separados entre sí por nueve leguas, y los árabes aseguran que donde hay un tesoro hay siempre agua fresca, siendo ésta una imaginación muy de ellos, añadiendo que, si uno encuentra un tesoro en un desierto, si no hubiese agua que beber en aquella comarca, éste moriría de sed y el tesoro quedaría en su escondite, y lo que desean los tesoros es ser encontrados y gastados.

 

fantasía- tgnbn-Anne Bachelier

 

Las cuevas en las que se encuentran los tesoros no fueron hechas por ellos. Se cuenta de algún tesoro que anduvo medio mundo buscando una agradable, y de otros que se metieron en cuevas de serpientes, llegando a un trato con ellas, que quedaron como guardianas. Las culebras duermen enroscadas al tesoro, y de tanto frotarse con él, terminan teniendo la piel de oro.»

Alvaro Cunqueiro.«Tesoros y otras magias»

 

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(Imágenes.-1-Julie Heffernan/ 2.-Inga Moore/ 3.-Alexander Jansson/ 4.-Salvador Dalí- 1941/ 5.-Marina Marcolin/ 6.-Anne Bachelier/ 7.-Katia Weisbeger)

EL ARTE DE PINTAR

 

cielos-nnvvyyt- nubes- paisajes- puertas- René Magritte- mil novecientos treinta y nueve

 

«El arte de pintar – que verdaderamente merece el nombre de arte del parecido – decía René Magritte -, permite describir, por medio de la pintura, un pensamiento susceptible de hacerse visible.

 

paisajes.-tynnm.-René Magritte.- Galerie Melki

 

 

Tal pensamiento comprende exclusivamente las figuras que el mundo nos ofrece: personas, cortinas, armas, sólidos, inscripciones, astros. El parecido reúne espontáneamente esas figuras en un orden que evoca directamente el misterio (…) El pensamiento inspirado se parece al mundo (…) evocando su misterio.»

 

pintores- nnhqa- los surrealistas- foto Anna Riwkin Brich -Tristan Tzara. Paul Eluard-Breton-Hans Arp- Dalí- Tanguy- Max Esnst-René Crevel  y Man Ray- mil novecientos treinta y tres

 

(Imágenes.-1.-René Magritte.-1939/ 2.- René Magritte.-galerie Melki/ 3.-los surrealistas-foto Anna Riwkin Brich. Tristan Tzara, Paul Éluard, André Breton, Hans Harp, Salvador Dalí,  Yves Tanguy, Max Ernst, René Clevel y Man Ray.- 1933)

MEDITERRÁNEO

mar.-ttuio.-Pierre Auguste Renoir.-1882

«Los habitantes del Mediterráneo hablan menos sobre las olas que sobre los vientos, quizá porque estos influyen más en sus estado de ánimo, incluso en su modo de hablar – escribe Pedrag Matvejevic en su «Breviario mediterráneo» (Destino)  que ya comenté aquí -. Las costas se prestan los vientos unas a otras, y no vacilan en cambiarles el nombre o la dirección. (…) Las corrientes marinas parecen ríos caudalosos: son obstinadas y silenciosas, indefinibles e incontenibles. (…) En nuestro mar, la pleamar y la bajamar no influyen particularmente en las corrientes. Aquí este fenómeno no cambia el escenario de la costa o el puerto, no determina el ritmo de los días y las noches, no es algo cotidiano.» El Mediterráneo va y viene entre pinturas,

mar.-iuun.-Odilon Redon

hallazgos y poesías. Si el escritor yugoslavo evoca la espuma del mar, el fenómeno de las nubes. los amaneceres y los crepúsculos, las grutas marinas, los golfos y los faros – tantas cosas que admiramos y contemplamos -, el gran historiador británico David Abulafia en su amplísimo y excelente libro «El gran mar» (Crítica) nos transporta ya desde el inicio por los nombres del mar : el «Mar de en medio» de los alemanes, «Nuestro Mar» de los romanos, el «mar Blanco» de los turcos, el «Gran Mar» de los judíos, el «Gran Verde» de los egipcios. Confiesa que no niega la importancia de los vientos y de las corrientes, pero le interesa poner en primer plano la experiencia humana de cruzar el Mediterráneo o de vivir en las ciudades portuarias y en las islas que dependían del mar para su existencia. Así las olas del mar, las orillas, el olor

mar.-t8juu.-Paul Signac.- Museo de la Anunciación.- Saint-Tropez

del alquitrán cerca de los astilleros, las redes o la pesca de las esponjas en Matvejevic se unen a los cinco Mediterráneos que recorre Abulafia desde el 22000 antes de Cristo al 2010 de nuestra era. Entre las corrientes marinas y las olas aparecen los intrusos que penetran en el mar, los mercaderes, los mercenarios, los misioneros, los héroes, y también los viajes innumerables por

mar.-rreevv.-Salvador Dalí.-bahía de Cadaqués.-1925

los caminos del mar. «Cada viaje tiene sus tiempos – escribía Ibn Yubair en el siglo Xll -, y el viaje por mar debe hacerse en su momento y en su época determinados.» Y citaba los versos de un poeta árabe que compendiaban todo; «el mar, amargo al paladar, es difícil.»

mar-ryuun-Claude Joseph Vernet.-Naufragio 1759.-Groeninge Museum .-Brujas

(Imágenes:- 1.- Pierre- Auguste Renoir.-1882/2.-Odilon Redon/ 3.-Paul Signac.-Saint Tropez/ 4.-Salvador Dalí.-bahía de Cadaqués.-1925/ 5.-Claude-Joseph Vernet..- Naufragio.-Groeninge Museum.-Brujas)

DALÍ EN PARÍS

”Desde 1929 – le dijo Dalí al gran periodista Indro Montanelli -, tengo la clarísima conciencia de ser un genio, es más, «el» genio: el representativo de mi tiempo. Esto se halla escrito ya en la morfología de mi rostro, como estaba escrito en el de mi hermano, que murió de meningitis a los siete años. Se llamaba Salvador también, porque también él hubiera, como yo, salvado al mundo: es decir, hubiera salvado lo que se puede y se debe salvar del mundo.

Lo que yo no sabía, era que este mi genio era, pongamos, no leonardesco o goethiano, sino rafaelesco. He atravesado períodos leonardianos y goethianos, en mi vida; pero ahora me doy cuenta de que eran mediocres aprendizajes. Todo lo que he hecho bajo ese signo representa cuanto de mejor ha sido hecho, pictóricamente, en la primera mitad de este siglo; pero no es nada, comparado con lo que estoy haciendo ahora y haré en adelante».

Montanelli se pregunta entonces ante estas palabras : «¿Orgullo consciente? ¿Mitomanía? ¿Deseo de asombrarme? Dalí, al hablar, no me mira a la cara, no se preocupa lo más mínimo de observar si le creo o no. Sabe muy bien que, si no le considero un genio, como se proclama, debo por fuerza considerarle un loco: lo cual, a efectos de éxito, vale otro tanto, si no acaso más. Probablemente, sólo se ofendería si adivinase lo que en realidad pienso de él: que no «es» genio, ni loco; pero se «hace» lo uno y lo otro con insuperable maestría».

«¿Bromeo seriamente? – había escrito antes el mismo Dalí – ¿Estoy diciendo verdades extraordinarias? ¿Es que las bromas se transforman en verdades? ¿Es que las verdades no son más que horribles chiquillladas? La locura, en mí, puede ser substancial, y la substancia más profunda, pura broma. Permanezco siempre ante esta constante interrogación: No sé cuándo empiezo a simular o cuándo estoy diciendo la verdad».

(Pequeño apunte, mientras está teniendo lugar una gran exposición en París sobre Salvador Dalí)

(Imágenes:- Salvador Dalí: 1.-Rosa meditativa.- 1958.-Fundación Gala-Dalí/ 2.-nacimiento de una Divinidad.-1960/ 3.- El simulacro transparente de la falsa imagen.- 1938.- Albright Knox Art Gallery.-Buffalo.-NY/ 4.- Salvador Dalí en 1954.-foto Philippe Halsman)