TÉ CON MIEL

Jessye Norman, la cantante de ópera norteamericana, confesaba “que en mi carrera artística aprendí que debo seguir este tipo de rituales lo menos posible si quiero hacer bien mi trabajo. Es cierto que cuando era una joven cantante en la ópera de Berlín, me di cuenta de que los cantantes más experimentados cuidaban de sus voces y de sí mismos, e incluso intenté incorporar algunos de sus ritos previos a una actuación en mi propia rutina preparatoria. Me  acuerdo de una cantante que me explicó confidencialmente que se tomaba un huevo crudo con té antes de actuar, justo el tipo de elixir que necesitaba. Pero para mí ese mejunje no funcionaba tan a las mil maravillas. Sin embargo, intenté seguir el ritual aquel del ”té con miel”,  una costumbre que adoptan muchos cantantes. Solía prepararme la mezcla en un termo que llevaba conmigo a las actuaciones.  Una vez, mientras salía con prisas de un Hotel de Viena para cantar en un recital, mi viejo termo, hecho de cristal por dentro, se me cayó de la bolsa y a causa del impacto contra el suelo se rompió en mil añicos. El ruido del cristal roto me dejó completamente atónita. ¿Qué iba a hacer? ¡Había echado a perder mi té! ¿Sería capaz de poder cantar? ¿ Podría subir al escenario? Justo en ese preciso momento y lugar decidí poner fin a ese ritual, dado que se había convertido en una simple muleta mental. 

Desde aquel momento lo único que tomo antes de una actuación es agua y zumo de fruta y no necesito beberlo de ninguna manera especial. Hidratación, eso es todo lo que necesito.”

José Julio Perlado

imágenes- 1- wikipedia/ 2- Jessye Norman- wikipedia