LA LUCHA POR LA VIDA

Quien piensa que en él ya existe todo — escribe un pensador contemporáneo —-,y, en consecuencia, puede nutrirse de esa plenitud y disponer de todo, se niega lo que podría dar. El ser humano no está sólo para hacerse a sí mismo, sino para aceptar desafíos. Todos nosotros estamos inmersos en la historia y dependemos unos de otros.
Por eso el ser humano no sólo debería pensar qué quiere, sino más bien preguntarse para qué es bueno y qué puede aportar. Entonces comprendería que la realización no reside en la comodidad, en la facilidad y en el dejarse llevar, sino en aceptar los retos, en el camino duro. Todo lo demás se convierte en cierto modo en aburrido. Sólo la persona que se «expone al fuego», que reconoce en sí una llamada, una idea que satisfacer, que asume una misión para el conjunto, llegará a realizarse. No nos enriquece el tomar el camino cómodo, sino el dar.

(Imágenes- Miquel Barceló)