perfecta
igual a sí misma
guardián de sus fronteras
con precisión repleta
de pétreo significado
con un aroma que a nada recuerda
a nadie espanta no despierta deseos
su ardor y su frialdad
son los justos y están llenos de dignidad
siento su pesado reproche
cuando la retengo en mi mano
y su noble cuerpo
absorbe mi falso calor
-Las piedras no se dejan domesticar
hasta el final nos mirarán
con su ojo calmo y clarísimo.
Zbigniew Herbert- «Estudio del objeto» (1961)
(Imagen.- Sandra Davolio- 2014)