EN EL TALLER DE CÉZANNE

pintores.-339.-Cézaann.-taller de Cézanne 1902

«Duranty, un antiguo amigo de Cézanne, habla de una visita al taller del pintor (que designa bajo el nombre de Mailloret) Cuenta que sus ojos fueron exaltados por enormes telas, suspendidas por todas partes, y «coloreadas terriblemente». Yacen por el suelo, en series grandes, potes de farmacia, con inscripciones latinas abreviadas; el pintor dice que esta es su caja de colores. Con una cuchara saca de uno de los potes una argamasa verde, que aplica a una tela, en la cual algunas líneas indican un paisaje. El color es aplicado, haciendo

casas.- 5dfg.- Paul Cezannegirar la cuchara sobre sí misma. Así, el espesor del color en las telas alcanza a menudo a cerca de un centímetro, y forma sobre las mismas como valles y colinas de un mapa en relieve. Evidentemente – dice DurantyMailloret creía que un  kilogramo de verde era más verde que un gramo del mismo color…»

«Hoy, al leer esto, no sabe uno –comenta Eugenio D´Ors en su «Cézanne» (Aguilar) -si divertirse o indignarse ante tanta incomprensión del verdadero sentido del esfuerzo de un artista. Esta caricatura de Cézanne, el Cézanne de la leyenda, ofrece rasgos tan íntimamente contradictorios con los auténticos rasgos del Cézanne, como el de atribuir una ignorancia estúpida de

paisajes-vgy-Paul Cézanne- estanque de Soeurs- mil ochocientos setenta y cinco

las propiedades físicas de los colores al hombre que probablemente había en su tiempo reflexionado con más hondura sobre problemas de este linaje (…) Duranty se equivoca al hablar del verde; la dominante entonces en ese  período empieza a ser el azul ; precisamente nace también en esta época la opinión de que su manera obedecía a una enfermedad óptica caracterizada, entre otras enfermedades, por la imposibilidad de ver el color verde».

fruta.-877g.- Paul Cèzanne.-Naturaleza muerta con manzanas y peras.-1885

Philip Sandblom – al que varias veces he aludido aquí refiriéndome a su ensayo «Enfermedad y creación» -, al analizar la vejez de Cézanne, recuerda cómo el gran pintor estaba cada vez más débil y enfermo por la diabetes y comprendía que sus días estaban contados: «Ya vislumbro la tierra prometida – decía -, ¿pero llegaré, o terminaré como el patriarca del pueblo hebrero? » Pocos días antes de su muerte, le escribió a su hijo: «Sigo trabajando en medio del dolor, pero algo saldrá de todo ello, y esto es, creo, lo que importa.» En sus últimos cuadros, las calaveras sustituyen a sus manzanas tan queridas, esas manzanas que formaban una nueva armonía de las esferas, y las calaveras, en cambio, símbolo de la

pintores.- 822ww.- Paul Cézanne.- autorretrato con sombrero.- 1894

vanidad. «Parece ser– evocaba Rilke sobre este último Cézanneque realmente trabajaba sin alegría, constantemente enfadado, en conflicto con todos sus cuadros, en ninguno de los cuales había podido lograr lo que él consideraba ser lo más indispensable, la réalisation

(Cuando en Madrid se inaugura  la exposición «Cézanne site/non- site»)

pintores.-3eee.-Cezanne y Pisarro

(Imágenes.-1.-taller de Cézanne.-1902/2.- casas/3.- estanque /4.- naturaleza muerta con manzanas / 5.-autorretrato con sombrero /6.- Cézanne sentado en el jardín de Pisarro en 1877)

«LA DAMA DE LOS KIMONOS BLANCOS»

flores.-88yy.-japón.- por Konan Tanigami.-grabado en madera japonesa

«Y tras todas estas sesiones de historias y leyendas que Hisae Izumi contaba en su casa magistralmente, años después, ‑precisamente después de 1185, después de la batalla de Dan-no-ura   ella, la dama japonesa, dedicó gran parte de su tiempo (sin duda para olvidar a aquel primer amor) a viajar por todo el archipiélago. La llamaron por entonces en Japón “la dama de los kimonos blancos” porque quizá para recordar a aquel Kiromi Kastase, el samurai muerto, quiso comprarse una serie de kimonos blancos como los que Kiromi llevaba, y vestida con ellos comenzó a recorrer todo el país. Fue primero a las costas de la isla de Dozen, en el archipiélago de Oki, y por las tardes se la veía pasear silenciosa arriba y abajo de la orilla. Cuando las gentes desaparecían y la costa quedaba desierta ella permanecía absorta escuchando siempre el sonido del mar. El sonido del mar venía entonces en caracolas redondas hasta ella, girando por debajo de las olas. Aquel sonido curvado de todas las aguas revolucionadas le iba llegando hasta su kimono blanco y allí se iban quedando impresos los sonidos sobre la blancura de la tela. Redondeaba y culebreaba el rumor del mar sus dibujos yendo y viniendo sobre la superficie del kimono, aparentemente sin tocarlo, pero impregnando de todos los sonidos las mangas hacia abajo, no sólo con los ruidos del movimiento de las aguas sino con la danza de los peces. Ese sonido tumultuoso del mar iba marcando dibujos tostados por todo el kimono, manchándolo de color de agua mezclada con arena y con puntas agudas de espuma como crines de estrellas. Y cada noche Hisae, al colgar su kimono en el armario, aquel kimono dibujado de sonidos, cerraba la puerta y desde la cama oía perfectamente el rumor del océano sobre la tela.

interiores.-6bbn.-Kengo Kuma.-Pabellón.-Japón 2005

En 1199 ‑ahora en la isla de Kyūshū y ante el estrecho de Iki‑, Hisae comenzó a lucir otros de sus kimonos blancos. Ya no era el sonido sino la fuerza de la corriente silenciosa la que le trazaba el dibujo. Se veía que allí tenía más poder el silencio que el ruido, y el mar, aun cuando se le oía, antes que nada se le veía avanzar impetuoso por los bordes del vestido de Hisae, que le esperaba en pie sobre la orilla. El mar venía girando sobre sí mismo, se autoenvolvía, y las corrientes rápidas iban subiendo kimono arriba hacia las mangas para luego descender hasta los pies. Hisae se dejaba querer por el color del mar, por los azules y los verdes, y por la noche, cuando Hisae colgaba ese kimono en su armario, él apenas estaba húmedo, aunque quedaban para siempre las manchas de las corrientes marinas.»

José Julio Perlado.-(del libro «Una dama japonesa«) (relato inédito)

SKD438347

(Imágenes.-1.-Konan Tanigami- 1917-adamsjapaneseprints.com/ 2.-Kengo Kuma.-Orbe Tea Room.- foto David Ano/ 3.-Carl Gustav Carus.-1819)

TALLER DE ESCRITURA J.J. PERLADO

libros.- 32se.- bibliotheque.tumblr

Unas palabras escritas por Goya y colocadas en el monumento que le dedicara Vaquero Turcios en el madrileño Parque del Oeste, muy cerca ya del río, siempre me han servido de orientación y aliento para mis clases:

“En la enseñanza de la pintura/

 hay que dejar en plena libertad

 correr el genio del alumno/

 sin oprimirlo/

 ni torcer su inclinación/

 a éste o a aquel estilo/

No hay regla en la pintura:/

lo mismo que la poesía/

 Escoge en el universo/

 aquello que encuentra/

 más apropiado a sus fines”.

escribir.-23cc.-bibliotheque tumblr

 

 Tal ha sido mi primer convencimiento y mi primera lección.

Durante catorce años he impartido clases o talleres de escritura – tanto en Madrid como en México – y recuerdo muy bien aquella mañana en la Universidad de Villahermosa, al sur de México –al aire libre, muy temprano, a causa del calor – cuando intentando explicar cómo mejorar o enriquecer la creación a una decena de jóvenes escritores mexicanos comenzó a cruzar lentamente por una alta y gruesa rama colocada sobre mi mesa de trabajo un silencioso mapache proveniente de un hermoso parque natural muy cercano. No se inmutaron los alumnos que estaban tomando apuntes y sólo muchos de ellos, al ver al animal en su elegante paseo sobre la rama, exclamaron exaltados : “Mire profesor, ¡un cuento, un cuento!”. No veían ya al animal sino que veían que el animal era un posible cuento caminando en las alturas. Para ellos , era la transformación de la realidad.  Ese día encargué a cada uno un relato sobre aquel tema concreto– un relato que me tenían que entregar en la clase siguiente – y no se me olvidará el mini-relato que uno de ellos me hizo llegar:

“Cuando se fue el escritor, el ambiente quedó saturado de un cauteloso hedor a mapache”.

libros.- 8he.- bibliotheque.tumblr

 Son los milagros de la creación. Durante años he intentado que esa transformación de la realidad traspasase cualquier frontera y que un rostro o una frase fuera motivo para poder inventar y para poder crear.

libros.- ty7jm.- bibliotheque. tumblr

Ahora comienzo un nuevo taller de escritura online – tanto de escritura creativa como interpretativa -que tendrá lugar durante el curso 2103-2104, y se inicia el próximo 1 de diciembre hasta el 31 de junio de 2014.

Bienvenidos todos los interesados en el tema.

libros.-6hhn.-wordpainting tumblr

(Imágenes:- 1, 2, 3 y 4.-biblioteque.tumblr/ 4.-wordpainting.tumblr) 

LECTURAS Y ESCRITURAS

lectura.-51aq.-Susan Ricker Knox.-1874-1959

 «La misma exactitud inteligente que nos lleva a escribir cosas buenas – se lee en los«Caracteres»de La Bruyère – nos hace temer que no lo sean bastante para merecer el ser leídas. Un talento mediocre cree escribir divinamente; un talento sólido cree escribir razonablemente.»

escribir.-ttrrbn.-Pierre Bonnard.-

«No se escribe sólo para ser comprendido, sino que al escribir es necesario, al menos, hacer comprender cosas bellas. Hay que poseer una dicción pura y emplear términos adecuados, es cierto; pero hace falta que esos términos tan propios expresen ideas nobles, vivas, sólidas y que encierren un sentido muy bello. Es hacer un mal uso de la pureza y de la claridad del discurso ponerlos al servicio de una materia árida, infructuosa, sin gracia, sin utilidad, sin novedad. ¿De qué les sirve a los lectores entender fácilmente y sin trabajo cosas frívolas y pueriles, a veces insípidas y vulgares, y quedar menos inseguros del pensamiento de un autor que aburridos de su obra?»

lectura.-5fr77.-jardín.-Frank Bramley

«Todo escritor, para escribir con claridad, debe ponerse en el lugar de los lectores, examinar su propia obra como algo nuevo para él, que lo lee por vez primera, en la que no tiene nada que ver y que hubiera sido sometido a su crítica por el autor, y, además, convencerse de que no le entienden a uno porque uno mismo se entienda, sino porque, en efecto, se es inteligible.»

lectura.-5vdd.-Sir John Lavery

«El que al escribir atiende sólo al gusto de su siglo piensa más en su persona que en sus escritos; hay que tender siempre a la perfección, y así, cierta justicia que a veces nos niegan nuestros contemporáneos, la posteridad sabrá rendírnosla.»

lectura.-revvb.- Louis le Brocquy.-1939

«Cuando una lectura eleva el espíritu e inspira sentimientos nobles denodados, no hay que buscar otra regla para juzgar la obra; es buena y hecha por mano experta.»

lectura.-rrtbh.-James Abbott McNeill Whistler.-1859

 Cuando cierro los «Caracteres»- siempre me acuerdo de la frase de Descartes: «la lectura de todo buen libro es como una conversación con los hombres más esclarecidos de los siglos pasados; una conversación selecta, en la cual no nos descubren sino sus mejores pensamientos.»

(Imágenes:- 1.-Susan Richter Knox.- 1874/2.- Pierre Bonnard/3.- Frank Bramley/4.- Sir John Lavery/5.- Louis le Brocquy/ 6-James Abbott Mcneill  Whistler.-1859- Museo de arte de Cleveland)

CASAS ABANDONADAS

casas.-rfthy.-Arünas Baltènas.-Vilnius

«Las ideas en literatura a veces duermen durante años. Juan Rulfo declaraba que su novela «Pedro Páramo» surgió del recuerdo de una muchachita que conoció cuando él contaba trece años. Hay ideas que nos persiguen, están rodeadas por otras; y sin embargo la idea válida emerge al fin. En torno a ese desfile o “persecución” de las ideas en muy diversos sentidos el norteamericano Erskine Caldwell hablaba así: “Veo en la calle un autobús escolar y te preguntas adónde irá. Después te imaginas una escuela y una maestra. Bien, ¿y quién es esta maestra? ¿ Qué aspecto tiene? (…) Entonces te acuerdas de algunas de las maestras que tuviste cuando eras pequeño. Y así todo el rato.” Es algo muy parecido a la “visión” que tuvo Pessoa en un tranvía de Lisboa: imaginar, dejar que la imaginación se expanda, extenderse en horizontes inacabables.

Personalmente, estas “visiones” siempre me han atraído, entre muchos otros lugares, hacia casas deshabitadas. Cuando paso ante esos jardines desolados, algunos al lado del mar, otros en las laderas de un monte o en un extremo de la ciudad, cuando me detengo ante esos portalones ya enmohecidos por el tiempo y vislumbro a  través de viejos ventanales habitaciones solitarias y vacías, se me aparecen todas las generaciones que allí vivieron, con sus voces, sus vestidos, sus pasiones y sus hábitos,  hay gentes que pueblan de repente esos espacios y desde la construcción de las escenas concretas (inventadas) me remonto hacia las grandes preguntas. ¿Cómo fueron, felices o desdichados? ¿Qué dejaron en sus vidas? A veces, en las clases de escritura, he repartido entre los alumnos grandes fotografías  de esas casas abandonadas y olvidadas para que las recreen con historias. En general lo han  hecho muy bien. Según los colores desvaídos y los restos de decoración que aún asomaban, según las puertas y ventanas, la altura de los techos, la disposición de los cuartos, la imaginación del escritor recrea hombres, mujeres y niños, coloca muebles, entabla diálogos. No se trata de escribir cosas generales ni reflexiones, sino de inventar, levantar – como si fuera un teatro – unos escenarios reales y humanos cargados de detalles, porque son los detalles los que siempre dan cuerpo a las historias.»

José Julio Perlado.«El proceso creador» (libro de próxima aparición)

casas.- 4rty.- Arunas Baltenas

(Imágenes:- 1 y 2.- .- Arunas Balténas)

LITERATURA DE LA AUTENTICIDAD

lectura.-4szn.-Werner Bischof.- Magnum Photos.-Finlandia 1948

«Ionesco en sus «Notas y contranotas» comentaba: “basta una presencia, una sinceridad ciega y, por eso mismo, clarividente: se pertenece (por el lenguaje) a ella o no se pertenece, casi naturalmente. Se tiene la impresión asimismo, que cuanto más se pertenece a su época más se pertenece a todas las épocas ( si se rompe la cáscara de la actualidad superficial). El esfuerzo de todo creador auténtico consiste en deshacerse de las escorias, de los clisés de un lenguaje agotado para recuperar un lenguaje simplificado, esencializado, renaciente, que pueda expresar las realidades nueva y antiguas, presentes e inactuales, particulares y a la vez, universales.”

Pienso que un creador debe ser auténtico, y por tanto  que lo que salva a un escritor es precisamente su autenticidad, su fidelidad, su honestidad consigo mismo. Parecen palabras banales ya que las palabras  se malgastan,  pero no lo son.. La historia de la Literatura es un cúmulo de cordilleras y valles que elevan y descienden con las modas, que vienen y van entre nombres y obras fervorosamente aplaudidas en su momento y olvidadas o sepultadas casi al  momento siguiente, si no a la generación siguiente. Algunos Premios Literarios, en líneas generales, desde el Nobel hasta el galardón localista o provinciano, suelen aparecer impregnados de intereses creados, con frecuencia teñidos de política unos – es decir, de instantaneidad – y mezclados otros con el oportunismo comercial. Lo que permanecerá en las estanterías de las novedades (que el tiempo va envejeciendo con celérica prontitud) será solamente  la autenticidad. La autenticidad permanece. Un escritor que ha sido auténtico consigo mismo se mantiene con una o dos obras suyas (quizá de las diez o  doce que publicó) y esas poquísimas obras se sostienen por encima de los vaivenes de los críticos y del resonar de las camarillas. La autenticidad es una moneda que se entrega personalmente al lector y no a esos circuitos comerciales cuya banda eléctrica recorre alocada los espacios de las ventas. Se ha escrito tanto sobre los gustos que un escritor auténtico no debe caer nunca en el servilismo de esos gustos, plegado cada vez al viento de lo que se lleva. (“Hay un elemento que quizá sea un poco preocupantedecía Javier Marías -: la rendición por parte de las editoriales. Han dicho: “Si el gusto del público es el que es, le voy a dar más de lo mismo”. Si  cada uno renuncia; si los autores a  veces se rebajan, porque tienen que vivir de algo y dicen: “”Está de moda la literatura policiaca de nuevo, pues voy  a hacer una policiaca, que no la he hecho nunca, o una novela histórica…”, si los autores renuncian a la idea de conseguir o de crear sus propios lectores; si se amoldan a los gustos preexistentes; si los editores se suman a lo mismo; si los críticos empiezan a  hacer lo mismo…, entonces ahí ya se está produciendo una especie de rendición incondicional. Y eso es peligroso.”)

Por la escritura de la autenticidad es, al fin, por lo que merece la pena escribir.»

José Julio Perlado.«El proceso creador» (libro de próxima aparición)

lectura.-5g778.-Nishant Choksi

(Imágenes:- 1.- Werner Bischof.- Magnun photos/ 2.- Nishant Choksi.- thegazoo.com)

CONCIERTO EN SUEÑOS

música.-55rrg.-guitarra.- Oleg Eldeukov.-

«Era un teatro vacío que debía de estar lleno de niños sentados en sus butacas de tapiz rojo y que, sin embargo, permanecía desierto. Salí al escenario, a la luz de aquella penumbra hundida hacia el infinito sobre la que las candilejas no me dejaban ver sino polvo en niebla rozando los hombros de las butacas, y comencé – sentado en mi silla solitaria – a puntear mi guitarra: el inicio de aquella clase infantil.

dolor.-eev- infancia.- Werner Bischof.-Hungría 1947

Seguí con mis ojos de niño cómo tocaba aquel hombre. Envuelto en cientos de cabezas, ladeándome un poco, conseguí adivinar entre todas las nucas los movimientos de la figura aislada, inclinada la frente sobre su instrumento, los dedos pellizcando las cuerdas. No veía sino muy de lejos la madera, el vientre de aquella resonancia que escuchaba. Todo el teatro aparecía sombrío: ojos paralizados en cada sillón atraídos por la luz del escenario, aquel foco blanco proyectado en la imagen oscura.

teatro.-por Lisa Kereszi.-2004.-Yancey Richardson Gallery.-New York.-photografie.-artnet

Entonces estuve centrado en la interpretación. Pulsé las cuerdas como acariciando los nervios de la música y con las yemas de los dedos fui oprimiendo los trastes cruzados de tiritas de metal; la palma de mi mano derecha reposando en la angostura del mango. Así nació, temblando bordones y alambres, el agua de los sones, gotas que surgían de la boca, del paladar del fondo, mientras abrazaba el borde y el contorno del cuerpo cercano al cuerpo mío formando una sola silueta, talle de guitarra grave hecha de carne. Nada veía, la luz me deslumbraba: solo un foso negro al otro lado de las candilejas y el vacío. Ningún oído de niño a este pulsar del adulto. El teatro sin teatro alguno: abierto al abismo aquel concierto de clase infantil.

teatro.-5wfb.-foto Trey Ratcliff.-StuckinCustoms.-Palais Garnier

Era un silencio absoluto el extendido en la sala. Jamás había visto un teatro. Todo el oro, el deslumbrante semicírculo de los palcos, las alturas del cielo, aquella cúpula de dibujos alados, el terciopelo rojo de las plateas, hasta el suave mullido donde mis zapatos resbalaban, lo había ocultado la negrura y una tensión densa era lo único presente, tal y como si colores y sensaciones se hubieran afincado en un único color y en individual sensación: aquella oscuridad que me cercaba y el escuchar. Jamás había escuchado una guitarra. La guitarra aparecía al fondo, hablaba en música ante un telón casi borrado por el ojo de luz. Yo no podía desprender mi ojo de niño de aquella luz de ojo y en ella estaba la guitarra: venía a mí desgranándose, como si cada sonido no tuviera más oído que el mío.

música.-rrttbn.- guitarra.- Carsten Eggers.-1957

Sobre mi pierna derecha descansaba aquel lomo redondeado, la curva de la caja entallada cuya forma octogonal caía hacia el lado izquierdo, allí donde índice, mayor, anular y meñique recorrían la plaqueta de ébano. Venía un aire suave, de ondas envueltas: igual que si alguien respirara el escenario. Pero el escenario estaba vacío: nadie entre bastidores ni a mi lado. No podía sentir aquel suave aire sino en un dulce movimiento de telas, pliegues de cortina que apenas se estremecían: negro telón tras de mí nunca entrevisto, oscuro, largo y ancho; dorso de luz que me cegaba. Bajo aquella luz, acordes, arpegios, acompañamientos, breves golpes de mano cerrada sobre las cuerdas, breves golpes de mano abierta sobre el puente, punteo de cuatro dedos con la mano izquierda; todas las armonías iban saliendo despacio, lo mismo que si se escaparan lamentándose. Así permanecí, inmóvil y solitario, hasta llegar al final.

música.-t3wss.-Stanislaw Eleszkiewicz.-1930.-autorretrato.-1900-1963

Al finalizar aquel hombre se levantó: concluyó el sonido. Tomó su instrumento y la luz le siguió hacia el lado derecho; el foco blanco le acompañaba en silencio. Fue entonces cuando el escenario se  iluminó débilmente: una fugaz claridad dejó ver cómo la negra cortina del fondo se descorría con lentitud y tras ella, sentado en una silla diminuta, un niño dejaba de tocar realmente su pequeña guitarra y preguntaba con voz de siete años:

– ¿Ya hemos terminado?

El niño tenía los mismos rasgos del hombre y el hombre le miró sin acertar a responderle.

Luego fueron apagándose todas las luces y sólo quedó una en el centro: un haz redondo y potente que provenía del techo. La luz acercó el rostro del hombre y se le vio llorar.

Suavemente me erguí. Me fui levantando del palco donde lo había visto todo oculto y agachado. Allí, en la sombra, en pie, muy lejos de él y sin poder consolarle, le vi llorar, él y yo solos en el teatro oscuro.»

JJPerlado.- «Concierto en sueños «.- Diario «ABC», febrero 1975

teatro,.nvm009.-Ohaio Sugimoto.-1980.-Wada Garou-co Gallery.-artnet

(Imágenes.-1.- Oleg Eldeukov/ 2.- Werner Bischof.- 1947/ 2.-Lisa Kereszi.- Yancey Richardson/ 3.-foto Trey Ratcliff- StuckinnCumston. com- Palais Garnier/4.- Carsten Eggers.-1957/ 5. -Stanislaw Eleszkiewicz.— 1930/6.- Hiroshi Sugimoto– – wada garou gallery.- artnet)

EL ESCRITOR

escribir.-34dd.-Albert Anker.-1875

«Tú dices que papá escribe muchos libros, pero yo no entiendo una palabra de lo que él escribe. Toda la noche estuve leyendo cosas. Di, ¿y tú entendías lo que él quería decir? ¡Tú sí que sabes contarnos cuentos bonitos, madre! ¿Por qué no los escribirá papá así? ¿ Es que su madre no le contó nunca historias de jigantes, de hadas y de princesas? ¿O es que se le han olvidado ya todas?

escribir.-uuybbm.-Edouard Vuillard.-1891,- Memorial Art Gallery de la Universidad de Rochester.-Estados Unidos

Muchos días tienes que llamarlo cien veces para ir al baño. Y lo esperas para comer, y vuelves a calentarle la comida, y él escribe que te escribe, olvidado de todo. ¡ Siempre jugando a escribir libros! Pero si yo voy una vez a jugar a su cuarto, tú vienes corriendo por mí y me gritas: » ¡ Qué travieso eres, hijo!». En cuanto yo hago un poquito de ruido, ya me estás diciendo tú : «¿ No ves que papá está trabajando?» ¡Ay!, ¿qué gusto le sacará a estar siempre escribiendo, escribiendo?

escribir.-ttggb.-Albert Anker.-wikimedia

Y cuando yo cojo el lápiz o la pluma de papá y me pongo a escribir como él a b c d e f g h i, en uno de sus libros, ¿por qué te enfadas así conmigo, madre? ¡A él no le riñes nunca porque escriba! Parece que no te importa que él estropee tanto papel. Pero si yo cojo una sola hoja para hacer un barco, ya estás tú riñéndome: «¡ Hijo, qué mareón eres!» Y a papá, que echa a perder tantas hojas haciéndoles letras negras por los dos lados, no le dices nada.»

Rabindranath Tagore.– «Autor».- «La luna nueva» (Traducción y ortografía de Zenobia Camprubí de Jiménez)

escribir.-trbb.- foto Sarki Stanislaw Solagajan

(Imágenes.- 1.-Albert Anker.-1875/ 2.- Edouard Vuillard.-1891.-Universidad de Rochester.-Estados Unidos/ 3.- Albert Anker.- wikimedia/  4.- Sarki Stanislaw Solagajan.-pixdaus.com)

AQUELLA ÉPOCA (2)

objetos.-iuun.-Cesar Baldaccini.-teléfono.-1963

«Podían contemplarse comercios exponiendo constantes novedades; se veían hombres y mujeres devorados por un apetito perpetuo de cambio, aturdidos no por lo auténtico sino por lo nuevo. Era así como en aquellos momentos lo reciente y lo antiguo sellaba de supuesto valor transacciones e intercambios: en rincones de ciertas casas, utensilios rozados por el tiempo y elementos decoradores de otras épocas, se adquirían a precios altos como restos aislados que formaran contraste: aparecían como salvados de un naufragio, tan alejados y extraños en su belleza como huesos de prehistoria, igual que si entre la marea de novedades se hubieran arrastrado flotantes aquellas piezas de lo desconocido, curvas y aristas y planos y formas de un mundo aéreo o subterráneo, misteriosos despojos de historia. Era en esos determinados rincones, donde unos hombres con otros mostraban, a veces sin saberlo, su personal identidad. Acaso con un diminuto objeto antiguo y sin más realce que el prestado por el tiempo, llegaba a descubrirse la clave de un temperamento o el matiz de una sensibilidad: incluso llegaba a descubrirse si quien ocupaba aquella casa y era propietario de aquel pequeño resto, carecía de sensibilidad propia y su gusto aparente no era sino producto de una moda, una inercia que había estado ayudada por la ostentosidad y el dinero.

objetos.-4vbbn.-Arman.-1962.-artnet

Pero aparte de estos lugares, de algún modo singulares y que por una u otra razón no podían mostrarse como los más frecuentes, era lo más habitual encontrar (como hoy también sucede), una tendencia intensa y extensa a la uniformidad y al parecido, tal como si viviendas, trajes y costumbres no existieran individualmente sino gracias a una suerte de mutua imitación.

objetos.-7hyh.-Jitish Kallat.-Collidontus.-2007.-Loe medios de comunicación

Era entonces como una especie de carrera incesante por poseer unos lo que poseían exactamente sus vecinos, pero no movidos por la necesidad sino estimulados por un secreto afán de ocultar todo retroceso personal o familiar, y situarse familias y personas – con sus objetos adquiridos, sus maneras de comportarse, e incluso los modos de desarrollar sus distracciones – en forma casi idéntica y mimética, hasta el punto de dejarse arrastrar por las mismas cosas hacia los mismos lugares, y confluir allí unos tan parecidos a los otros, que podía con razón hablarse de un solo hombre único ocupando gran parte del globo, formado ese hombre por millones de seres que parecían haber perdido sus preferencias para sumirse en el gusto común.»

JJPerlado.- «Contramuerte», págs 22- 23

(Imágenes:- 1.- Cesar Baldaccini– 1963/ 2,- Arman.-1962.- artnet/ 3.-Jitish Kallat)

HISAE IZUMI

paisajes.-998.-monte Fuji.-Japón.-1880.-por Kimbey Kusakabe

«Después de muchos años de dudas no se ha llegado a confirmar la fecha exacta del nacimiento de Hisae Izumi, una dama japonesa nacida en la pequeña ciudad de Ayabe, cerca de Kyoto, en los inicios del siglo Xll. Célebre profesora y educadora, mujer enormemente versátil, musa de escritores y artistas durante mucho tiempo, gran viajera y autora a su vez de varios libros hoy muy reconocidos, estuvo dotada desde el principio de su vida con una prodigiosa imaginación y una despierta inteligencia que, unidas a los rasgos de su belleza que se haría legendaria, le confirieron una poderosa personalidad.

Ya desde su juventud destacó por su poder de crear, algo que le acompañaría toda su vida, y todos los Anales cuentan de ella la asombrosa organización casi teatral con la que lograba atraer y fascinar a sus oyentes en cuanto desplegaba sus historias.

Solía contar, por ejemplo, por las noches muchísimas historias del pasado en aquella humilde casa de Ayabe, rodeada de amigos y vecinos.

paisajes.-uuyn.-Japón.-cascada.-Shunkyo Yamamoto 1871- 1933

El pasado se erguía cada noche en la habitación de Hisae Izumi adornada de telas transparentes y a través de las telas y delante de los que escuchaban sentados en el suelo asomaba de pronto hacia las doce el majestuoso aspecto del emperador Tenmu vestido con su coraza de hierro, los gruesos brazos tatuados y sosteniendo en las manos el luminoso globo de la astronomía. El emperador Tenmu, lejano antecesor de los padres de Hisae, había sido el hombre más versado en astronomía de toda Asia y se decía que los caminos de las estrellas y las sendas de las galaxias eran para él tan conocidos como los de su propia casa: atravesaba los cielos infinitos con una mirada lenta y andaba con sus ojos muy despacio sobre el suelo de las constelaciones. Eso lo solía hacer el emperador Tenmu en la medianoche, cuando el universo estaba encendido, y después de dar ese paseo espaciado, como vigilando a qué fuerza brillaban las estrellas de la constelación del Cisne, escuchaba los silbidos de la Vía Láctea como una fuga de vapor. Aquel silbido alargado y quejumbroso penetraba hasta los oídos de Hisae, de pie ante el auditorio, sosteniendo en alto las cortinas de la habitación hasta que Tenmu desaparecía. Porque el emperador Tenmu se hacía en aquellos momentos invisible. El arte de hacerse invisible lo dominaba Tenmu de tal forma que Hisae, muchas noches, al contar su leyenda, apartaba de un golpe las telas y cortinas y preguntaba a quienes seguían escuchando su relato: «¿Acabáis de ver a Tenmu? No, no lo habéis podido ver porque Tenmu no existe. La coraza que habéis creído ver no existe, tampoco sus brazos tatuados, tampoco el globo de la astronomía. No existe Tenmu. Sólo existen mis palabras. Mis palabras son las que le han sostenido. Si no existieran mis palabras, el emperador Tenmu no se os hubiera aparecido en la imaginación. La imaginación, a los que habéis escuchado mis palabras, os ha hecho creer que veíais a Tenmu detrás de esas cortinas. Pero ahora yo no dejaré de hablar. En cuanto yo deje de hablar Tenmu desaparecerá por completo. Ya. Ya ha desaparecido.» E Hisae dejaba caer las telas y ante el círculo de los oyentes su silencio disolvía todo lo que ellos habían pensado; ya no sabían quién era el emperador Tenmu, no habían oído nada sobre él, nada habían visto, ni siquiera aquel cielo estrellado que ahora se contemplaba al otro lado de las telas parecía un inmenso mundo astronómico fulgurante y parpadeante. Pero Hisae proseguía: «¿Es que hay algo en el espacio?«, y sostenía con su mano las cortinas descorridas. «¿Está dando su paseo Tenmu como todas las noches sobre las estrellas? No. Él no está paseando. No puede pasear. No existe Tenmu. Lo están diciendo mis palabras. Creedme. Mis palabras sí son visibles. Es Tenmu el invisible. Son mis palabras las que poseen la fuerza.»

japón.-44tty.-Shunkyo Yamamoto.- artelino. com

Y entonces Hisae dejaba caer las cortinas y se sentaba en el suelo en medio del círculo de los oyentes y retaba a los demás a que escribieran todas aquellas cosas que ella acababa de decir. «Veréis como no es posible – les decía -. Escribir lo que ahora os cuento es muy difícil. Escribir en sí es muy difícil. Las palabras se las lleva el viento y hay que ir hasta el viendo del noroeste que sopla en invierno sobre las costas del mar interior para detener a las palabras que se van, y traerlas y fijarlas en el papel. Todo lo que no se fija sobre el papel con los signos de la escritura sólo lo oímos por los oídos y los oídos después ya no escuchan nada, los oídos descansan cada noche en la almohada y de los oídos que duermen van saliendo poco a poco los hilos de las palabras recibidas durante el día y ellos salen de nuevo vaciando la cabeza para que la cabeza pueda llenarse al día siguiente. Las palabras que no fueron escritas se las lleva el viento y el viento las lleva hasta las dunas de Tottori. ¿Conocéis vosotros las dunas de Tottori ante la bruma de las islas? Sí, sí las conocéis. Están ante el mar de Japón, mirando a la isla de Dögo. Esas dunas están hechas con palabras. Son kilómetros de palabras, arenilla sedosa y ondulada de todas las palabras que se pierden y que nunca fueron registradas, todas esas palabras que no fueron escritas, como las mías ahora si no las escribís. Estas palabras mías que yo pronuncio están yendo ya hacia las dunas de Tottori. Allí se convertirán muy pronto en arena. Allí el mar las disolverá.»

José Julio Perlado: (del libro «Una dama japonesa») (relato inédito)

japón.-ervbb.-Shunkyo Yamamoto.-aac.pref.aichi

(Imágenes:- 1.-monte Fuji.-1880.-Kimbey Kusakabe/2 3 y 4.--Shunkyo Yamamoto.-artelino. com)

LA CREACIÓN Y EL SUEÑO

sueños.-98nn.-el hombre dormido.-por Berhnal Greeen.-Victoria Park Gardens

«Todos nosotros somos creadores durante el sueño, y en el fondo, lo mismo que el misterio del sueño, la creación es muchísimas veces vaticinadora, es decir, anticipatoria, reveladora – me decía Rof Carballo en Madrid, en 1977 -. La creación, para mí, es realmente algo que no lo agota el psicoanálisis, ni mucho menos ese mundo vasto e inmenso que es el sueño. La creación es una de las fuerzas curativas más importantes del hombre: es decir, que no se consigue la salud tan sólo por el equilibrio del interior, sino por el despliegue en amplio horizonte de lo superior y la labor creadora ( bien sea en el sueño, o sea en la real actividad de creación). Para mí, el libro creador se ve inmediatamente, puesto que le agarra a uno gracias a la sorpresa; cuando uno encuentra un estilo que le sorprende, unas ideas o una manera de pensar que le asombran, entonces uno se halla ante un creador: uno se siente tan renovado como después de una ducha, o de un baño durante el verano en el océano.»

J.J. Perlado («Diálogos con la cultura».-págs 119-120)

sueños.-3dee.-Yoshitaka Amano

«Recuerdo un pasaje de Allisondecía Borges – en el cual él dice que cuando soñamos, somos, a la vez, el teatro, los actores, la pieza y el autor; somos todos a un tiempo. (…) Ahora, si el hecho de soñar fuera una suerte de creación dramática, resultaría que el sueño es el más antiguo de los géneros literarios; y aun anterior a la humanidad porque – como recuerda un poeta latino – los animales sueñan también. Y vendría a ser un hecho de índole dramática; como una pieza en la cual uno es autor, es actor, es el edificio también – es el teatro -. Es decir que, de noche, todos somos dramaturgos de algún modo.»

(Imágenes:- 1.-El hombre dormido.-Berhnal green.-victoria park garden/ 2.- Yoshitaka Amano)

LA ESCRITORA VIVE AQUÍ

escritores.-42cv.-Clarice Lispector.-foto Claudia Andujar

«La escritora vive aquí», así tituló sus semblanzas literarias – el perfil de sus obras, pero sobre todo de sus casas – Sandra Petrignani (Siruela) hablando, entre otras figuras destacadas, de Karen Blixen , Grazia DeleddaMarguerite Yourcenar. Pero las casas de muchas escritoras (de muchos escritores) tienen, además de los muros y de las ventanas, de las mesas, los jardines, los objetos útiles o los objetos preciosos, unos espacios silenciosos que comunican con pasillos de soledad y éstos a su vez abren las puertas a las habitaciones del reposo y en el reposo suele vivir la concentración, y en torno a la concentración hallamos nuevamente la soledad y el silencio.

escritores.-09jj.-Marguerite Duras

«La soledad de la escritura – decía Marguerite Duras en «Escribir» (Tusquets) – es una soledad sin la que el escribir no se produce, o se fragmenta exangüe de buscar qué seguir escribiendo.(…) Alrededor de la persona que escribe libros siempre debe haber una separación de los demás. Es una soledad. Es la soledad del autor, la del escribir. Para empezar, uno se pregunta qué es ese silencio que lo rodea. Y prácticamente a cada paso que se da en una casa y a todas las horas del día, bajo todas las luces, ya sean del exterior o de las lámparas encendidas durante el día. Esta soledad real del cuerpo se convierte en la, inviolable, del escritor.»

escritores.-56bnn.-Clarice Lispector

«Es la gran responsabilidad de la soledad. – recordaba a su vez la excelente escritora brasileña Clarice Lispector – En cuento a mí, asumo la soledad. Que a veces se extasía como ante los fuegos artificiales. Soy sola y tengo que vivir una cierta gloria íntima que en la soledad puede convertirse en dolor. Y el dolor, en silencio. Guardo su nombre en secreto. Necesito secretos para vivir.»

También repetía Duras: «Cuando yo escribía en la casa todo escribía. La escritura estaba en todas partes. Y cuando veía a mis amigos, a veces no acertaba a reconocerlos.(…) Un escritor es algo extraño. Es una contradicción y también un contrasentido. Escribir también es no hablar. Es callarse. Es aullar sin ruido. Un escritor es alguien que descansa, con frecuencia, escucha mucho. No habla mucho porque es imposible hablar a alguien de un libro que se ha escrito y sobre todo de un libro que se está escribiendo. Porque un libro es lo desconocido, es la noche, es cerrado, eso es. El libro avanza, crece, avanza en las direcciones que creíamos haber explorado, avanza hacia su propio destino y el de su autor, anonadado por su publicación: su separación, la separación del libro soñado, como el último hijo, siempre el más amado.»

Por eso cuando se entra en las casas de las escritoras  (de los escritores) el silencio nos abre el picaporte de la soledad y la soledad nos abre las ventanas del silencio.

(Imágenes:- 1.-Clarice Lispector.- foto Claudia Andújar/ 2.-Marguerite Duras.-1955.-foto Lipnitzki- Roger Viollet.-Getty images/3.-Clarice Lispector–hoyesarte.com)

¿CREES QUE TÚ MISMA PUEDES ESCRIBIR UN LIBRO?

escritores.-tyhh.-Karen Blixen.-Isak Dinesen.-1920

«Entre los somalíes, entre los masai – así se lee en la entrevista a Isak Dinesen que recogió «The Paris Review»  -, la baronesa fue una gran doctora, una cazadora merecedora del título de «Reina Leona»  pero a quien se sospechaba incapaz de escribir un libro. La duda era dirigida por su joven criado Kamante:

«- Msabu, ¿crees que tú misma puedes escribir un libro?

Le respondí que no lo sabía.

Para figurarse una conversación con Kamante hay que imaginarse una pausa larga y grávida antes de cada frase, como si tuviera una profunda

responsabilidad. Todos los nativos son maestros en el arte de las pausas y de este modo dan perspectiva a una discusión. Kamante hizo una pausa así,  y luego dijo:

– Yo no lo creo.

escritores,.44fvv.-Isak Dinesen -Karen Blixen y Kamante.-artnet

Yo no tenía a nadie con quien hablar de mi libro: así que dejé a un lado mi papel y le pregunté por qué no. Descubrí que había estado pensando en aquella conversación previamente y que se había preparado para ella; tenía detrás suyo la mismísima Odisea y la depositó sobre la mesa.

– Mira, Msabu, éste es un buen libro. Está unido de un extremo a otro. Hasta si lo levantas y lo sacudes con fuerza no se hace pedazos. El hombre que lo ha escrito es muy listo. Pero lo que escribes – prosiguió con una mezcla de desprecio y de amable compasión – está un poco ahí y otro poco allá. Cuando la gente se olvida de cerrar la puerta, el viento lo mueve, se cae al suelo y entonces te enfadas. No será un buen libro.

Le expliqué que en Europa lo juntarían todo».

«De lo que Kamante verdaderamente dudaba es de que un blanco pudiera crear una narrativa como la propia, oral, con la complicidad del viento».

escritores.-ttb.-Peter Beard sobre Karen Blixen,-. artnet

«Todo se convertía en un pretexto para inventar una historia – decía de Karen Blixen su sobrina Ingeborg, y así lo relata Sandra Petrignani en «La escritora vive aquí» (Siruela) – . Y siempre era muy clara y precisa. Nunca aburrida. Una mujer especial, yo la adoraba. Tenía unos ojos muy oscuros, muy bonitos. Le venían de su madre. Sus estados de ánimo me sorprendían, pero no los temía como les sucedía a casi todos. Era sarcástica, y si se aburría, se convertía en una hiena. «Diviérteme, dime todo lo que ha pasado. ¿Has estado en alguna fiesta? ¿Quién estaba? ¿De qué habéis hablado? ¿Quién estaba sentado a tu lado? No podías responder de manera vaga o distraída. Ella quería todos los detalles. Pero todo ese interés hacía que te sintieras importante.(…) Uno de los criados a quien más cariño cogió en África, Kamante, resultó ser cocinero original y de gran clase».

Isak Dinesen.-rdvv,.Peter Beard.-Fahey.-Klein Gallery.-artnet

«Los leones – decía -, cuyo rugido es como «el tronar de los rifles en la oscuridad«, se convertirían para ella en el símbolo del físico perfecto. En «Memorias de África» mira fascinada sus cuerpos desollados: «ni una sola partícula de grasa superflua«, sólo músculos tensos y potentes. «Elegantes hasta los huesos». Y sobre los elefantes escribió en «Daguerrotipos«: «es fútil preguntarse para qué sirve un elefante: se cumple en sí mismo, con su cola delante y detrás».

«En realidad – le había respondido ya a Clara Svendsen en una entrevista – tengo tres mil años, y he cenado con Sócrates«, como ya hace tiempo recordé  en Mi Siglo.

(Imágenes.-1.- Karen Blixen.-1920.-caribarao.org/ 2.-Karen Blixen y Kamante.-artnet/ 3 y 4.- Peter Beard.-artnet) Peter Beard.-Fahey/ Klein Gallery.-artnet)

DESCUBRIR UN ESTILO

estaciones.-t877h.-invienro.-cielos.-noche.-Henry Farrer.-1869.-Museo Metropolitano de Arte

André Malraux ha dedicado extensas y luminosas palabras a la creación artística en su obra “Las voces del silencio”. Sus análisis son certeros. “El hombre que llegará a ser un gran pintor – dice, por ejemplo – comienza por descubrir que él es más sensible a un mundo particular, el denominado del arte, que al otro mundo más común a todos. Nota en él una necesidad tiránica de pintar, sabiendo que él va  a pintar sin duda al principio mal, y que se adentra en una aventura. Atraviesa así el tiempo del pastiche, generalmente detrás de los grandes maestros, hasta que toma conciencia de un desacuerdo entre eso que “significa”, y que él imita, y la pintura que él presenta. Distingue confusamente un esquema personal que va a liberarle de los maestros, y enseguida veremos como él recurre a lo real.

pintores.-66hhn.-John Singer Sargent en su estudio.-París 1884.-Archivos de Arte Americano.-Smithsonian Institution

Cuando ha conquistado, sucesivamente o alternativamente, su color, su dibujo y su materia; cuando lo que era un esquema se ha transformado en un estilo, aparece una nueva significación pictórica del mundo, que el pintor, cuando llegue a envejecer, aún modificará más y profundizará. Este proceso no agota la creación artística, pero de ella tampoco se escapa. Puesto que cada una de estas operaciones tiende a metamorfosear las formas. (…)

figuras.-21sws.-Ram Kumar.-India.-1970.-Museo de Bellas Artes de Boston

“Existe una lógica coloreada, decía Cézanne, el pintor no debe obediencia más que a ella, nunca a la lógica del cerebro”, y Malraux comenta: esta frase, una de las más fuertes y sinceras que un pintor haya dicho jamás nos revela por qué, sobre lo esencial de su arte, todo pintor de genio permanece mudo; porque escribir sobre eso que pinta le parece completamente vano. Sus desacuerdos, su vocación, no han nacido ante el universo ni ante los libros, sino delante de los cuadros. Él no quiere necesariamente cambiar el mundo, ni la relación del hombre con Dios, él quiere oponer, a los cuadros que existen, los cuadros que no existen aún.”

arte.-tyhnn.-Willy Pragher.-1960

(Imágenes:-1.-Henry Farrer.-1869.-Museo Metropolitano de Arte/2.-John Singer Sargent en su estudio.-1884.-Archivo de Arte Americano/3.- Ram Kumar.-1970.-Museo de Bellas Artes de Boston/ 4.-Willy Pragher.-1960.-en el Museo Británico.-Londres.-pinterest.com)

VIOLETAS DE CÉZANNE

paisajes.-swss.-Paaul Cezanne.-1894

«Tengo una pequeña sensación, mas no consigo expresarme  – decía Paul Cézanne -; soy como aquel que poseyendo una pieza de oro no puede, sin embargo, servirse de ella».

paisajes.-4fcvb.-robles.-Paul Cezanne.-1885

«El tiempo y la reflexión, por lo demás, van modificando paulatinamente nuestra visión hasta que, por último, llegamos a comprender.»

flores.-5rggbb.-Paul Cézanne.-1890.-Barnes Foundation Philadelphia

«… tendría que haber dicho: cierto blanco metálico, aluminio o algo así, porque gris, literalmente gris – escribía Rilke en una carta el 24 de octubre de 1907 – no hay en los cuadros de Cézanne. Ante su mirada inmensamente pictórica no tenía validez de color: al examinarlo a fondo lo descubría violeta, o azul, o rojizo, o verde. En especial reconoce con gusto al violeta (un color que nunca hasta entonces había sido desplegado de manera tan minuciosa y variada) allí donde nosotros esperamos sólo gris y nos contentaríamos con él; pero él no cede y extrae violetas que están como hundidos, así como lo hacen algunos anocheceres, anocheceres de otoño sobre todo que abordan al agrisado oscurecer de las fachadas directamente como violeta, de modo que este les responde en todos los matices, desde un lila leve y oscilante hasta el violeta denso del granito de Finlandia (…) Si bien es característico en él usar amarillo cromo y lacre rojo intenso sin mezcla en sus limones y  manzanas, sabe sin embargo mantener la sonoridad dentro del cuadro: plenamente, como en un oído resuena en el interior de un azul que escucha atento, y recibe de él una respuesta muda de modo que nadie en el exterior se sienta requerido o reclamado.»

arte.-uun.-Paul Cézanne.-13 abril 1906.-Gertude Osthaus

«Cartas sobre Cézanne» de Rilke, escritas desde la rue Cassette  (Editorial y Librería Goncourt)…

Violetas de Cézanne, el hombre que al principio confesaba: «Tengo una pequeña sensación, mas no consigo expresarme…

(Imágenes:-1.-Cezanne.-1894/2.-Cezanne.-1885/3.-Cezanne.-1890.-Barnes.-Fundación Philadelphia/4.-Cezanne el 19 de abril de 1906.-foto Gertrude Osthaus.-Marburg/Art Ressource.-NY)

SOBRE LA SERENIDAD

mar.-tuuh.-paisajes.-Childe Hassam

«Lúcido. Sereno quizás es una palabra más expresiva, puesto que presupone la idea de lucidez – escribió el novelista y ensayista inglés Charles Morgan -. Un cielo sereno es a la vez transparente y tranquilo; en cambio, un cielo tormentoso puede presentar intervalos luminosos. No obstante, es importante asociar ambas palabras, puesto que la penetración en la esencia de las cosas, a través de la luz, constituye el último fin de la serenidad. Es posible estar tranquilo sin hallarse sereno; una cara puede poseer una expresión de estúpida tranquilidad; una cara serena es solamente aquella que se ilumina con la luz del espíritu».

paisajes.-5gbnnin.-Joni Niemelä

(…) «Me atrevo a decir que la serenidad es lo que distingue incluso el bien del mal y que su presencia o ausencia es uno de los medios por los que pueden ser identificados ambos conceptos morales. La alternativa no radica, pues, como pretende la crítica moderna de la vida y el arte, en la elección entre el optimismo y el pesimismo, entre el sentimentalismo y el realismo objetivo, ni entre el romanticismo y el naturalismo. Estas distinciones quizá puedan tener su importancia a efectos de clasificación, pero en modo alguno son esenciales. La distinción esencial debe realizarse entre lo sereno, lo luminoso y lo atormentado y oscuro. En música jamás se han compuesto páginas más trágicas que las del movimiento lento del Quinteto en G menor de Mozart o el Tercer Estudio de Chopin, Opus 10. Ni tampoco más serenas».

(Imágenes: –1.-Childe Assam/ 2.-Joni Niemelä)