SOBRE El MAQUILLAJE

Baudelaire, en 1895, recurre a una palabra nueva, “maquillaje”, y subraya su poder misterioso asimilándola a un espectáculo , a un arte. “Ese marco negro de los ojos — recuerda también un historiador francés — vuelve la mirada más profunda y más singular, da al ojo una apariencia más decidida de ventana abierta al infinito;  por su parte, el “ rojo” aumenta aún más la calidad de las pupilas y añade a un hermoso rostro femenino la misteriosa pasión de una sacerdotisa”.  Recuerdan  los historiadores, que las sustancias para maquillarse durante el siglo XlX  eran muy numerosas y las herramientas también más  diversificadas, desde los cepillos del cabello hasta los cepillos de dientes. Pero la novedad se hallaba en la manera de considerar a los cosméticos. Se encuentra en el efecto de “superación”, que parece  sugerir:  ya no sólo se los aplica para la corrección de algún defecto, sino para la profundización de los “encantos”  de su reconocida fuerza.  Para Baudelaire, esa belleza hecha de investigación y de meditación, consumaría “la belleza moderna,  que puede surgir a través del encanto fáctico del artificio y de la moda”. Incluso sería una característica central de la modernidad,  que obligaría a cada persona a inventarse a sí misma.

 José Julio Perlado

imágenes- wikipedia