
Otra vez se hacen más largas las cartas
a la luz, clavadas en frívolas
hojas: los cuentos deambulan
con el sol, locuaces y sencillos.
La ambigua fiesta ya enmudeció
y el mundo de las posibilidades crece con las sombras. Sólo uno dice:
Es igual que era.
Como un ladrón, el viento
da un tirón a nuestra ropa y el agua no tiene ya más tiempo para la discreción
Michael Krüger — La alfombra negra bajo los ciruelos
(Imagen- wikipedia)