… PERO NO HAY AGUA

“ Si hubiera agua

en vez de roca

si hubiera roca

y también agua

y agua

un manantial

una poza entre la roca

si por lo menos se oyera el sonido del agua

no la cigarra

y la yerba seca cantando

sino el agua resonante sobre una roca

donde canta el torzal ermitaño en los pinares

Drip drop drip drop drop drop

pero no hay agua.”

T. S. Eliot—“La tierra baldía”

(Imagen — Kane Gledhill)

BANCA Y POESÍA


“La poesía no me ha sido de gran ayuda en mi carrera bancaria; en cambio, mi trabajo en banca me ha permitido escribir mis poemas. Por la noche, no tenía el espíritu envenenado del trabajo del día y podía llevar adelante dos vidas intelectuales distintas — decía el gran poeta inglés T. S. Eliot—. El trabajo en banca — confesaba también a sus amigos— es el más interesante del mundo. Es tranquilo y me permite vivir en Londres, continuar mis trabajos y ver a los amigos: el banco es acogedor y estimulante.

A mi me ha resultado muy útil ejercer otras actividades, como trabajar en un banco o incluso ser editor. Y creo también que el hecho de no disponer de todo el tiempo que querría me lleva a concentrarme. Quiero decir que me ha impedido escribir demasiado. Por lo general, el peligro de no tener nada más que hacer es que uno se ponga a escribir demasiado en vez de concentrarse en una producción más pequeña y perfeccionarla. Al menos ése sería el peligro para mí.

Escribí buena parte de mi obra de teatro ”El viejo estadista”, con lápiz y papel, sin pulir nada. Luego lo pasé yo mismo a máquina antes de dársela a leer a mi mujer. Cuando paso a máquina yo, introduzco cambios bastante considerables. Aunque tanto da que escriba a mano o a máquina, cualquier composición un poco larga, como una obra de teatro, me exige una rutina horaria, por ejemplo de diez a una. He descubierto que tres horas al día es lo máximo que puedo dedicar a la composición en sí. Después quizá pulo algunos detalles. Al principio me encontraba con que a veces quería seguir escribiendo un rato más, pero cuando al día siguiente veía el resultado comprobaba que lo escrito tras esas primeras horas nunca era satisfactorio. Es mucho mejor parar y ponerse a pensar en otra cosa completamente distinta.”

(Imágenes—1-Jonnho Jeon – 2006/ 2- TS Eliot- elpais / 3- Eliot y Virginia Woolf- abc es)

LAS QUIETAS PROFUNDIDADES MISTERIOSAS

“Cuando el artista es conducido involuntariamente, y aun a despecho de sí mismo a producir los materiales de su obra, éstos le son dados sin que él, valga la expresión, intervenga, como si le viniera de fuera — dice Schelling—.” Eliot dirá algo parecido: ” se trata de una concentración y de algo nuevo que resulta de tal concentración, concentración de un gran número de experiencias que a las personas activas y prácticas en modo alguno podrían parecerles experiencias; se trata de una concentración que no tiene lugar de un modo consciente y deliberado.” Carlyle hablaba también de que es allí donde en la poesía ” el hombre se concentra o se retira a las más recónditas profundidades de la realidad humana donde penetra a través de la quietud, esa infinita quietud — ahora en palabras de Hölderlin— en la que obran todas las energías y en la que todas las relaciones se verifican.”

(Imagen— Howard Hodgking)