“La mansión está construida alrededor de un gran patio donde se recoge la basura y se almacena la leña. — describía el poeta Batiushkov en el siglo XlX —; más atrás hay un huerto con verduras, y en el frente un gran porche enrejado, como los que había en las casas de campo de nuestros abuelos. Al entrar en la casa, uno se encuentra con el portero jugando a las cartas, lo hace desde la mañana hasta la noche. Las estancias no están empapeladas; las paredes están cubiertas con grandes cuadros ; de un lado retratos de zares rusos, del otro una pintura de Judith sosteniendo la cabeza cortada de Holofernes en una bandeja de plata de gran tamaño; maravillosas creaciones hechas por algún sirviente doméstico. Vemos la mesa dispuesta con tazones de sopa de col, puré de guisantes dulces, setas horneadas y botellas de “kvas”. El anfitrión está vestido con un abrigo de piel de carnero; la anfitriona con una capa. En el lado derecho de la mesa está el sacerdote de la parroquia y el profesor de la parroquia; a la izquierda, una multitud de niños, el viejo hechicero, una madame francesa y un preceptor alemán.”
(Imágenes—: 1— Arkhangelelskoye/2- niebla en un estanque de Moscú- Wikipedia)