EN EL TALLER DE CÉZANNE

pintores.-339.-Cézaann.-taller de Cézanne 1902

«Duranty, un antiguo amigo de Cézanne, habla de una visita al taller del pintor (que designa bajo el nombre de Mailloret) Cuenta que sus ojos fueron exaltados por enormes telas, suspendidas por todas partes, y «coloreadas terriblemente». Yacen por el suelo, en series grandes, potes de farmacia, con inscripciones latinas abreviadas; el pintor dice que esta es su caja de colores. Con una cuchara saca de uno de los potes una argamasa verde, que aplica a una tela, en la cual algunas líneas indican un paisaje. El color es aplicado, haciendo

casas.- 5dfg.- Paul Cezannegirar la cuchara sobre sí misma. Así, el espesor del color en las telas alcanza a menudo a cerca de un centímetro, y forma sobre las mismas como valles y colinas de un mapa en relieve. Evidentemente – dice DurantyMailloret creía que un  kilogramo de verde era más verde que un gramo del mismo color…»

«Hoy, al leer esto, no sabe uno –comenta Eugenio D´Ors en su «Cézanne» (Aguilar) -si divertirse o indignarse ante tanta incomprensión del verdadero sentido del esfuerzo de un artista. Esta caricatura de Cézanne, el Cézanne de la leyenda, ofrece rasgos tan íntimamente contradictorios con los auténticos rasgos del Cézanne, como el de atribuir una ignorancia estúpida de

paisajes-vgy-Paul Cézanne- estanque de Soeurs- mil ochocientos setenta y cinco

las propiedades físicas de los colores al hombre que probablemente había en su tiempo reflexionado con más hondura sobre problemas de este linaje (…) Duranty se equivoca al hablar del verde; la dominante entonces en ese  período empieza a ser el azul ; precisamente nace también en esta época la opinión de que su manera obedecía a una enfermedad óptica caracterizada, entre otras enfermedades, por la imposibilidad de ver el color verde».

fruta.-877g.- Paul Cèzanne.-Naturaleza muerta con manzanas y peras.-1885

Philip Sandblom – al que varias veces he aludido aquí refiriéndome a su ensayo «Enfermedad y creación» -, al analizar la vejez de Cézanne, recuerda cómo el gran pintor estaba cada vez más débil y enfermo por la diabetes y comprendía que sus días estaban contados: «Ya vislumbro la tierra prometida – decía -, ¿pero llegaré, o terminaré como el patriarca del pueblo hebrero? » Pocos días antes de su muerte, le escribió a su hijo: «Sigo trabajando en medio del dolor, pero algo saldrá de todo ello, y esto es, creo, lo que importa.» En sus últimos cuadros, las calaveras sustituyen a sus manzanas tan queridas, esas manzanas que formaban una nueva armonía de las esferas, y las calaveras, en cambio, símbolo de la

pintores.- 822ww.- Paul Cézanne.- autorretrato con sombrero.- 1894

vanidad. «Parece ser– evocaba Rilke sobre este último Cézanneque realmente trabajaba sin alegría, constantemente enfadado, en conflicto con todos sus cuadros, en ninguno de los cuales había podido lograr lo que él consideraba ser lo más indispensable, la réalisation

(Cuando en Madrid se inaugura  la exposición «Cézanne site/non- site»)

pintores.-3eee.-Cezanne y Pisarro

(Imágenes.-1.-taller de Cézanne.-1902/2.- casas/3.- estanque /4.- naturaleza muerta con manzanas / 5.-autorretrato con sombrero /6.- Cézanne sentado en el jardín de Pisarro en 1877)

GENTES DE DAUMIER

Daumier.-tt33d.-la lavandera -1835.-Museo de L´Hermitage

«Los humildes a los que ve por la calle o desde su ventana –va comentando el crítico de arte  Escholier sobre Honoré Daumier -, los payasos con oropeles de miseria y caras lívidas, los cantores de coro y organilleros, las mujeres que suben desde el lavadero con la espalda doblada bajo el peso de los fardos de ropa, las viejas y los campesinos, apretujados en los vagones de tercera que los llevan a Barbizon o a l `Isle-Adam, los carniceros y carpinteros, los jugadores de dominó, los fumadores de pipa, los bebedores de cerveza: ésos son los motivos que Daumier pinta con ternura.»

Daumier.-yyggb.-desfile de saltimbanquis.-1877.- Museum of fine Arts.-Boston

Son las gentes pintorescas,

Daumier.-rttb--,. tercera clase.-1853-1865.-Museo Metropolitano de Nueva York

las gentes viajeras,

Daumier.-4ftt.-viaje en tren

gentes que nunca aparecerán en la Historia,

Daumier.- rhhbb.-el vagón de tercera.-Museum Metropolitan.- Nueva York

gentes anónimas,

Daumier.-ttgyy.-dosd hombres sentados a una mesa.-

Baudelaire dirá de Daumier «que su dibujo es generoso, fácil; una improvisación corrida, continua. En cuanto a la moral, Daumier… es claro y directo. La idea se desprende por sí misma. Basta mirar para comprender… Su caricatura tiene una amplitud formidable, pero carece de rencor y de amargura. Hay en toda su obra un fondo honesto y bonachón».

Daumier.-67jji.- teatro

Champfleury, que escribió una historia de la caricatura moderna, al destacar de ésta su valor artístico, señala que «lo que caracteriza a los hombres de talento es que nos interesan su transparentar de sombras, trazos geniales insinuados, una especial utilización del lápiz, un imprevisto efecto de luz, un grafismo fantástico, que hacen que la grandeza, la fuerza, el estilo, la disposición de los personajes, el movimiento cómico y la caricatura vivan por sí mismos y no pertenezcan a ningún país ni a ninguna civilización  (…) Daumier ha sintetizado en sí todo el poder cómico de los numerosos caricaturistas que le han precedido; ha aportado en su arte un sentido del color que hace de cada uno de sus croquis una obra poderosa. Cualquier grabado de Daumier puede contemplarse desde las más atrevidas concepciones del arte moderno. Por su ardor, sólo Delacroix podría competir con el caricaturista.»

Daumier.-ttun.- le ventre legislatif.- 1834.-exposición de la Biblioteca Nacional Francesa

Henri Focillon, BaudelaireLionello Venturi  firman el pequeño volumen «Daumier« (Casimiro) – en el que el gran crítico italiano de arte recuerda que Daumier «tenía el gesto«, es decir, la capacidad de sintetizar en un gesto un carácter humano. Para alcanzar esa síntesis Daumier se vio obligado a trabajar de memoria, sin modelo. «Tiene una memoria maravillosa y casi divina – decía Baudelaireque ocupa el lugar del modelo.» Por eso cuando Henry Monnier visita la casa de Daumier para posar y hacerse un retrato, ve el retrato ya terminado en el caballete y grita: «¡Soberbio! No conviene tocarlo!». Y cuando Daumier se acerca a la casa de Geoffroy – Dechaume porque éste posee unos canarios y él necesita añadir unos canarios en una composición, al ofrecerle aquél un cuaderno y un lápiz, Daumier responde: «Gracias. Ya sabes que no puedo dibujar directamente del natural

(Imágenes.- 1.- mujer con fardo y niña en la calle.-1850.-Praga.-Národmi Galerie/ 2.- desfile de saltimbanquis.- 1877.-Museum of Fine Arts.- Boston/ 3.-vagón de tercera clase.-1853- 1865.- Museo Metropolitano.- Nueva York/ 4.- interior de un vagón de primera clase.-1877/ 5.- vagón de tercera clase/ 6.-dos hombres ante una mesita.- fumadores en el café.-1856-1860.- Zurich.-Stiiftung Sammlung E. G. Bührle/ 7.- teatro.-1877.-Museo de Bellas Artes.-Boston/ 8.-le ventre legislatif,. 1834. Exposición de la Biblioteca Nacional de Francia)