LA INFANCIA EN El ARTE (2)

 

 

He aquí este rostro que nos mira  – apoyado el codo en el piano – , el de Julie Manet, hija de Berthe Morisot y de Eugène Manet, hermano del pintor. La tarde entra hasta el frescor luminoso de este cuarto y los dedos rozan las teclas en este pastel hoy guardado en una colección particular. La infancia en el arte nos brinda la intimidad de la música, aunque en este momento aún no pueda desvelarse lo que será esta niña, relacionada en el futuro con tantos artistas, y que escribirá un Diario en torno a muchos creadores. La tarde se queda en la puerta contemplando esta escena y la mirada soñadora de Julie no sabe aún cuánto le espera, todo lo que le va a suceder en la vida.

 

 

Mármol blanco para este busto de Camille Claudel que ha tomado como modelo a Madeleine Boyer, hija de los propietarios del Castillo de l Islette de Touraine. Ojos elevados al cielo, ondulaciones del cabello, mirada fija en la esperanza. Se acercaba hasta esta escultura Claude Debussy para admirarla y comentó en voz baja:  » una de las más graciosas evocaciones que han inspirado a un poeta del mármol: la llamada con la cual  un niño interroga a lo desconocido».

 

 

Refugiados los ojos en un rincón de la habitación, esta niña en azul de 1918 de Amedeo Modigliani observa y espera. Así lo hará siempre mientras nos mira. Ojos que hablan. Ojos que retratan. » Muchos de estos ojos – dirá un crítico once años después – nos miran desde los lienzos, pensativamente conscientes de su vida frágil, angosta, con su propia miseria o su mórbida sensibilidad desvelada». Esta niña graba en las pupilas todo cuanto ocurre, pero también su mirada se alarga sobre cuanto nosotros escondemos, sobre cuanto queremos que siga oculto. Singular notario infantil que nada olvida.

(Imágenes.- 1- Berthe Morisot -Le Piano – 1888 -colección particular/ 2-Camille Claudel -le Petite Châtelaine- 1896- Roubaix, La Piscine, museo del arte y la industria/ 3 – Amedeo Modigliani -Fillette en bleu -1918 -colección particular)

NIJINSKY

baile- bbggr- Nijinsky- foto de Krasnoe Selo- mil novecientos siete- wikipedia

 

Tras la muerte de Vaslvav  Nijinsky – recordaba hace pocos días el doctor López Ibor Aliño en una intervención académica – se le practicó la autopsia y los dos patólogos que la llevaron a cabo comenzaron por abrir a lo largo y a lo ancho sus tobillos para encontrar el secreto del baile del mayor de los genios de la danza. Nada había de anormal y volvieron a cerrar las incisiones. El baile de Nijinsky, pues, no estaba en sus tobillos sino en su cerebro.

Su cerebro y sus movimientos de gran bailarín fascinaron no sólo a muchedumbres de espectadores sino a figuras eminentes de las letras. Paul Claudel, en «El ojo escucha»- en Washington y en 1927 -decía de él al verle aparecer: «Nijnsky aportaba otra cosa, los pies en fin han dejado la tierra! Él aporta la victoria de la respiración sobre el peso (…) Es la posesión del cuerpo por el espíritu y el empleo de lo animal por el alma, aún, y aún, y de nuevo, y aún una vez más, lánzate, gran pájaro, al encuentro de una sublime derrota! Él cae, a la manera de un rey que desciende, y de nuevo él se lanza como un águila y como una flecha. El alma durante un segundo lleva al cuerpo, este vestido es transformado en llama y la materia es transporte y grito! Él recorre la escena como como el relámpago, y apenas se vuelve viene hacia nosotros como la tormenta. Es la gran criatura humana al estado lírico…, toma cada uno de nuestros movimientos más profanos y los transporta en el mundo dichoso de la inteligencia y de la potencia».

 

baile.-danza.-66gb.-Nijinsky en Monte Carlo.- foto de Stravinsky en 1911

 

Otro gran admirador suyo, Auguste Rodin, le aclamaba al contemplarle en la «La siesta de un fauno»: «entre la mímica y la plástica, el acuerdo es absoluto: el cuerpo entero significa lo que quiere el espíritu; él posee la belleza del fresco y de las estatuas antiguas; es el modelo ideal al cual uno desearía dibujar, esculpir».

Jean – Louis Vaudoyer comentaba cómo «él se elevaba varios metros del suelo, describía una parábola aérea y desaparecía a los ojos del público. Cuando se le preguntaba cómo podía realizar semejante prodigio, contestaba: «Es muy fácil, uno no tiene mas que pararse un poco en el aire antes de descender».

 

baile - bjju- Nijinsky en el ballet La siesta del fauno- mil novecientos doce- Leon Bakst- wikipedia

 

El gran crítico musical Adolfo Salazar, en «La danza y el ballet», al referirse a la aparición del gran bailarín en los «Juegos» de Debussy, resumía que» al final Nijinsky sufría en su trabajo más que cualquier otro artista de su profesión, perjudicado por una ignorancia completa de la música, una inteligencia lenta y una falta de flexibilidad que contrastaba con su maravillosa ductilidad muscular, su admirable plástica corporal, no igualada por nadie».

«Todo el mundo va a repetir – escribió el bailarín en su «Diario»que Nijinsky ha perdido la razón.¡ Qué importa, ya que en casa ya me he comportado como un loco y todo el mundo está convencido! Pero no se me conducirá al asilo puesto que soy un excelente bailarín y doy dinero a todos aquellos que me lo piden. Se aman por otro lado los seres extraños, excepcionales, y se me dejará marchar en paz tras haberme llamado «clown».

 

Choreographer Nijinsky and Composer Ravel Sitting at Piano

 

(Imágenes.- 1.-foto de Krasne Selo- Nijinsky en 1907- wikipedia/ 2.-Nijinsky en 1911- foto de Stravinsky/ 3.-cartel de «La siesta de un fauno»- 1912- Leon Bakst/ 4.- Nijinsky y Maurice Ravel- 1912)

SOBRE LA GUITARRA

música.-55gyy.-guitarra.- Alexander Eckener.-1933

«Las dos manos en la guitarra – aconsejaba Andrés Segovia – son igualmente importantes. La mano debe ser, al mismo tiempo, como líquida, enérgica y fuerte. Las uñas han de ser a un tiempo resistentes y blandas. Duras, para que no se rompan o desconchen, y blandas, para que la calidad del sonido no sea demasiado ácida. Tocar con las yemas es reducir la guitarra a un solo color. En los acordes fuertes hay que tirar de las cuerdas, y eso produce unos chasquidos que nada tienen que ver con los sonidos que se buscan.»

La desaparición hace menos de dos meses de  Paco de Lucía ha llevado a muchos medios de comunicación a hablar nuevamente de la guitarra. Regino Sainz de la Maza, en su ensayo «Historia de la música para guitarra» con motivo de los tres conciertos que se celebraron en el Ateneo de Madrid en abril de 1955, recordaba cómo la guitarra ha estado muy unida a grandes músicos.

música.- r77yy.-guitarra.- joven con guitarra.- 1910.- escuela catalana.- klassiskgitar.net

«Paganini, por ejemplo – decía– , acompañando a cierto Rafael que tocaba la mandolina, hacía sonar su guitarra de manera eminente, usando de acordes de gran dificultad y de arpegios bellísimos, valiéndose de una digitación completamente personal (…) La guitarra de Paganini pasó a manos de Berlioz y hoy se conserva en el Museo del Conservatorio de París. Es un instrumento insigne, construido por el luthier Grobert- Mirecourt en el siglo XlX (…) Berlioz, por su parte, no olvidaba jamás la guitarra en sus viajes, y así se le veía siempre con ella en Subiaco, en los alrededores de Roma, cantando «La Vestale», mientras

música-cfv-Henri Lebasque-guitarra- mil novecientos veintitressu guitarra hacía las veces de orquesta (…) Boccherini percibió igualmente el encanto de la guitarra, que cultivaba con pasión, y así lo revelan los tres quintetos  que escribió en 1778, en los que introduce la guitarra, así como en la última de sus sinfonías, que tiene una parte de guitarra obligada (…)

música.-55rrfn.-Albert Edelfelt.-guitarra.- 1854-1905Igualmente Shönberg, Weber y Stravinsky han utilizado la guitarra en diversas combinaciones instrumentales, y no tan sólo por la rareza de su timbre. Schönberg habla de ella en su «Tratado de armonía» y por otro lado, cuando Falla quiere rendir recuerdo a la memoria de Debussy, es la guitarra el instrumento que elige para cantar sobre su tumba el llanto armónico de las seis cuerdas.»

De todo ello habló y escribió entonces Sainz de la Maza en el Ateneo de Madrid

música.-rr5tt,.- Thomas Eakins.- - guitarra.- 1888

y lógicamente quiso recorrer las grandes figuras de la guitarra, deteniéndose en Fernando Sor en el siglo XVlll y en Francisco Tárrega en el XlX.

música-nnhnn- guitarra-  Jean Antoine Watteau

«Mi labor diaria – confesaba Andrés Segovia sobre su trabajo– consiste en dos horas y media de estudio por la mañana, divididas en dos descansos, cada uno de los cuales después de hora y cuarto de ejercicio. El artista que afirma estar estudiando ocho o diez horas diarias miente o es un burro, porque después de hora y cuarto de trabajo inmenso, los dedos están cansados y la mente también… Por la tarde, igual que por la mañana, con la misma interrupción, después de la cual pueden venir distracciones de muy diferentes especies…

La guitarra está cansada, no yo.»

(Imágenes.-1.-Alexander Eckener– 1933/ 2.-klassiskgitar. net/ 3.-Henri Lebasque- 1923/ 4- Albert Edelfelt/ 5.-Thomas Eakins- 1888/ 6.-Jean Antoine Watteau)

video: Francisco Tárrega.-«Recuerdos de la Alhambra» –Emmanuel Rossfelder)