
Nuestros estados de ánimo no creen los unos en los otros —decía el filósofo y poeta norteamericano Ralph Waldo Emerson —. Hoy me siento lleno de ideas y puedo escribir lo que me plazca. No veo razón alguna por la que no vaya a tener las mismas ideas mañana, y el mismo poder de expresión. Lo que escribo me parece, mientras lo escribo, lo más natural del mundo; pero ayer veía un vacío aterrador en la misma dirección en la que hoy me parece ver tanta abundancia. Y dentro de un mes, no me cabe duda, me preguntaré quién fue el que escribió tantas páginas seguidas. Ay, esta débil fe, esta voluntad que nada tiene de firme, este gran reflujo de un flujo igual de grande.
José Julio Perlado
