«Si quieres hacer azul,
coge un pedazo de cielo y mételo en una olla grande
que puedas poner al fuego del horizonte;
luego mezcla el azul con un poco de rojo
de la madrugada, hasta que se difumine;
vacíalo todo en un recipiente bien limpio,
para que no quede rastro de las impurezas de la tarde.
Finalmente, tamiza un poco de oro de la arena
del mediodía, hasta que el color se adhiera al fondo de metal.
Si quieres, para que los colores no se destiñan
con el tiempo, arroja en el líquido un hueso de melocotón quemado.
Lo verás deshacerse, sin dejar rastro de que alguna vez
allí lo pusiste; y ni siquiera el negro de la ceniza dejará restos de ocre
en la superficie dorada. Luego puedes levantar el color
a la altura de los ojos, y compararlo con el azul auténtico.
Ambos colores te resultarán semejantes, sin que
puedas distinguir entre uno y otro».
Nuno Júdice.- «Receta para hacer azul» (traducción de Jerónimo Pizarro y Nicolás Barbosa López)
(Imágenes.- 1.-Nasrollah Afjjei/ 2.-Victor Vasarely)

